La undécima etapa del Giro de Italia se decidió al esprint, nuevamente con caída de por medio, con la victoria para el italiano del Androni Roberto Ferrari. Se impuso en la volata a su compatriota Franceso Chicci y al lituano del GreenEdge Tomas Vaitkus. La fuga del día estuvo compuesta por Mickael Delage (FDJ), Olivier Kaisen (el muy activo en este Giro corredor del Lotto), Stefan Denilf (Vancasoleil), Manuele Boaro (Saxo-Bank) y el español del Euskaltel-Eukadi Adrián Sáez de Arregui. Más de 230 kilómetros en cabeza. Bravo por ellos.
La general sigue sin cambios, es decir, con Joaquim Rodríguez vestido de rosa. El líder del Giro está mostrando encontrarse muy bien de forma física, pero también muy conectado a la carrera y con una enorme ilusión por hacer algo grande en este Giro. Sabe que está ante una oportunidad única de ganar una Grande y es consciente además de que el resto de rivales le señalan como el gran favorito para alzarse con el triunfo final en Milán. Sabe también que queda lo más duro del Giro por delante, pero no le asusta y de hecho ya ha dicho que le atrae especialmente el Mortiloro, puerto que será uno de los jueces de la carrera en esa terrorífica última semana de Giro. Está enchufado, fuerye y con mucha ilusión. Motivos de sobra para seguir soñando, con fundamento, con verle de rosa en el podio final de Milán, ¿por qué no? como dijo él cuando empezó esta carrera. El tiempo le está dando la razón, pues está por delante de todos sus rivales y gozando del liderato de la carrera.
Hoy toca una etapa corta y explosiva que puede dar mucho juego. Son 155 kilómetros entre Seravezza y Sestri Levante con cuatro puertos puntuables, uno de ellos de segunda categoría a 33 kilómetros de meta. Día ideal para las fugas.
Quiero hacer un par de apuntes al margen del Giro sobre dos noticias. La primera, por supuesto, es obligada. Peter Sagan se está luciendo en el Tour de California. Quienes sigan este blog con asiduidad conocerán ya mi predilección por el joven ciclista eslovaco. Es un corredor extraordinario, no tanto una promesa de futuro o un diamente en bruto, sino una realidad brillante. Creo que Sagan es de esos corredores jóvenes capaces de aspirar a lo que se propongan. Tiene una punta de velocidad temible para el resto de corredores y es, como digo, mi ojito derecho, un ciclista del que estoy siempre muy pendiente porque me maravillan sus muchas cualidades y creo que puede crecer mucho más en el futuro. A lo que iba, en California llevan cuatro etapas disputadas, las cuatro al esprint, y las cuatro con el mismo ganador. Sí, Peter Sagan. Y no se está enfrentando a corredores de segundo nivel, ni mucho menos. Ayer, por ejemplo, segundo fue en el esprint Haussler, tercero Matthewss y cuarto Tom Boonen. Casi nada. Hoy en esa carrera se disputa una crono de 29,7 kilómetros. De momento, Sagan es líder de la general, evidentemente, con 16" sobre Haussler y 34" sobre Lauder.
La otra noticia es relativa a la prueba que realizó ayer Contador en el mismo recorrido de la etapa de 2010 en la que comenzó toda la pesadilla del clembutero. Fue un acto promocional para la marca Flex, que patrocina el ciclista con una preciosa campaña. Lo destacable, además de hacer caja, es que el pinteño está en forma y listo para volver por sus fueros. Aquí le estaremos esperando.
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