Personajes del año (Segunda parte)
Rui Costa: del Mundial de ciclismo en ruta de 2013 los españoles siempre recordaremos la errática estrategia final de los nuestros, tras conseguir llegar a una situación de carrera maravillosa para nuestros intereses. Es lógico que así sea. Pero no deberíamos excluir de nuestro recuerdo la astucia y la fortaleza de un corredor portugués con un enorme olfato y una clase desbordante: Rui Alberto Costa. Él se impuso con todo merecimiento en el Mundial y vestirá el arcoíris durante el próximo año. Además de ese momento culminante del año, que no tiene comparación con ninguna otra carrera, Rui Costa tiene otros tantos grandes triunfos como para enmarcar este 2013, su último año en Movistar. Dos etapas del Tour de Francia, dos etapas y la general de la Vuelta a Suiza, la Klásica de Primavera y el campeonato luso contrarreloj. En 2014, Rui Costa será el líder de Lampre-Merida. Un salto en su carrera que le llevará a asumir responsabilidades como jefe de filas. Prueba de fuego para él.
Chris Horner: la sonrisa permanente de Christopher Horner durante toda la Vuelta a España parecía lanzar dos mensajes. El primero, y más importante, decía que estábamos ante un señor de 41 años (ahora ya 42) que era feliz montando en bicicleta, que disfrutaba con el ciclismo. El segundo mensaje que algunos intuimos que lanzaba esa sonrisa, tal vez estamos equivocados, era algo así como "tomadme en serio, que voy a ganar la Vuelta". Cuando Horner se puso líder destacamos que batía un récord de edad como líder de la ronda española, pero costaba pensar en serio en sus opciones para la general. Sin embargo, poco a poco fuimos viendo que ese veterano ciclista estadounidense nacido en Japón, porque allí estaba destinado su padre marine, que come hamburguesas cuando compite y que disfruta de la vida y del ciclismo, podía ganar la Vuelta. Y lo hizo, incluso resistiendo a siete ataques durísimos de Nibali subiendo el alto del Angliru. Uno detrás de otro. Sus dos etapas y la general en la Vuelta fueron sus grandes logros en un 2013 donde también ganó una etapa en el Tour de Utah. Ha tenido que soportar insinuaciones constantes por su edad y por el clima de desconfianza generalizada que impera, lamentablemente, en el ciclismo. Para 2014, de momento, no tiene equipo.
Peter Sagan: imponente, genial, único. Peter Sagan ha continuado dando espectáculo y cosechando victorias por doquier este 2013. Insultantemente joven, con un potencial bárbaro y sin techo a la vista, el eslovaco ha sido de nuevo uno de los protagonistas del año ciclista. Y los que le quedan. Por orden cronológico, dos etapas del Tour de Omán, el Gran Premio de la Ciudad de Camaiore, dos etapas de la Tirreno-Adriático, Gante-Wevelgem, una etapa de los Tres Días de La Panne, la Flecha Barbanzona, dos etapas del Tour de California, dos etapas de la Vuelta a Suiza, el campeonato en ruta de Eslovaquia, una etapa del Tour de Francia más el maillot verde de la regularidad, cuatro etapas del USA Pro Cycling Challenge, tres etapas del Tour de Alberta y el Gran Premio de Montreal. Es el palmarés de Sagan en 2013. Sobran las palabras. Para 2014, buscará más victorias y conquistar su primer monumento.
Alejandro Valverde: desde que competía en categorías inferiores, Valverde (Bala Verde) fue un ganador nato, uno de esos ciclistas con una facilidad inusitada por conseguir victorias. Donde ponía el ojo, solía poner la bala, gracias a su punta de velocidad y a su capacidad para resolver etapas y arrimar el ascua a su sardina. Este 2013, sin embargo, tenemos una versión distinta de Valverde, de nuevo compitiendo por lo máximo y apareciendo entre los mejores en las grandes carreras, pero costándose mucho más rematar. Triunfos ha logrado este año (el trofeo Serra de Tramuntana de la Challenge Ciclista de Mallorca, la Vuelta a Andalucía más dos etapas y la clasificación por puntos de la Vuelta Ciclista a España), pero le ha costado más conseguirlos. Con todo, Valverde ha seguido arriba. Un año más (hemos perdido ya la cuenta de cuántos van), la suerte no estuvo de su lado en el Tour. Esta vez, la mala fortuna llegó en forma de abanico que le apartó del grupo de los elegidos en una ronda gala donde, hasta ese momento, aparecía como más serio rival de Froome. Se recompuso y volvió a la Vuelta, donde luchó como acostumbra para ser tercero en el podio final. En el Mundial, Valverde logró situarse como el ciclista con más medallas en la prueba (tres bronces y dos platas), pero terminó Toscana 2013 en medio de malos rollos con su compañero de selección Joaquim Rodríguez. Valverde se equivocó al no salir a por Rui Costa en ese ataque, pues con Purito escapado su misión era marcar a Nibali y Costa. En todo caso, esa polémica, aunque sin duda acompañará siempre a sus protagonistas, ya es parte del pasado y conviene en todo caso pensar que puede tener sencilla explicación: las piernas no respondieron, tal vez. Para el próximo año, parece que Valverde será el líder de Movistar en el Tour en la que aparece como su última gran oportunidad por ser jefe de filas en la ronda gala. Después correrá la Vuelta para estar en forma de cara al Mundial 2014 de Ponferrada. Tal vez ahí llegue la sexta medalla. Tal vez con el único metal que le falta.
Marcel Kittel: este alemán de 25 años ha arrebatado en 2013 el título de mejor sprinter del mundo al británico Mark Cavendish. Al menos, se impuso con claridad en el duelo de velocistas que es el Tour de Francia. Allí ganó cuatro etapas. El corredor del Argos-Shimano también se ha llevado una etapa en el Tour de Omán, en la París Niza, enla Ster ZLM Toer, el Circuito de Houtland, el Scheprijs Vlaanderen, la ProRace Berlin, el Tour de Picardie más dos etapas y tres etapas de la Vuelta a Turquía. Para el próximo año volverá a buscar ser el velocista más destacado del pelotón. Este año logro otro hito importante, vestir de amarillo en el Tour.
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