El muro de Huy, ese impresionante escenario donde se resuelve cada temporada la Flecha Valona, es un arma de doble filo para la clásica belga. Por supuesto, es una bendición, porque es una ascensión muy reconocible que le da a la carrera un sello propio. Pero, por otro lado, también implica que todo el mundo dé por hecho que la carrera se decidirá en la subida final, lo que desincentiva los ataques lejanos y hace previsible la carrera. En esa disyuntiva se mueve la Flecha Valona, que hoy ha disputado sus ediciones femenina y masculina.
En la prueba femenina ha ganado Anna Van der Breggen, igual que las cinco ediciones anteriores. Es impresionante el dominio de la corredor neerlandesa en esta carrera, que manda a su antojo, atacando donde, cuando y como quiere para mandar en el muro de Huy. Es su primera victoria tras proclamarse campeona del mundo en Imola y prolonga así una racha soberbia de victorias, ya que también viene de ganar el Giro Rosa.
Antes de ese ataque descomunal de Van Der Breggen, que se impuso en meta a Cecilie Utrupp Ludwig y a Demi Vollering, las protagonistas del día fueron las neerlandesas Kirstie van Haaften y Marieke van Witzenburg y la española Mireia Benito.
En la prueba masculina, ninguno de los dos grandes dominadores de las últimas ediciones de la carrera (Alejandro Valverde y el flamante campeón del mundo, Julian Alaphilippe) era de la partida. Alaphilippe ha preferido reservarse de cara a la Lieja-Bastoña-Lieja, que se disputará el domingo. Ante la ausencia del francés, ganador en 2018 y en 2019, y de Valverde, vencedor aquí en 2006 y de 2014 a 2017), el abanico de favoritos se ampliaba, con Marc Hirschi como uno de los nombres a tener en cuenta.
El ciclista suizo del Sunweb, la sensación de la última edición del Tour, tercero el domingo en el Mundial, se ha impuesto en la durísima subida final al muro de Huy. Ha vencido por delante de Cosnefroy y de Woods. Otra victoria sensacional para Hirschi, ganador de una etapa y de la combatividad del Tour de Francia. 2020 está siendo el año de su consagración como gran protagonista del ciclismo mundial a sus 22 años.
Un año menos tiene Mauro Vansevenant, el otro gran nombre del día de hoy, ya que ha entrado en la escapada del día y ha seguido en cabeza casi hasta el final. A falta de tres kilómetros, cuando aún conservaba una renta de medio minuto con el pelotón y en torno a 20 segundos con Rigoberto Urán, que lo perseguía, el ciclista belga ha sufrido una caída sin consecuencias, pero que le ha hecho perder tiempo. Incluso después de la caída siguió pedaleando con fuerza, intentando alargar su sueño tanto como fuera posible, mostrado garra y calidad. Otro nombre más a tener en cuenta en esta era de renovación absoluta del ciclismo, en la que insolentes veinteañeros reclaman todo el protagonismo.
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