25 de octubre de 2020. No olvidarán fácilmente este día en el equipo Ineos. El día en el que el superdomingo previsto no pudo ser, ya que inicialmente iban a coincidir en la misma jornada la última etapa del Giro, la etapa del Tourmalet de la Vuelta y la París-Roubaix, ha sido finalmente una memorable jornada de ciclismo. Sobre todo, para el Ineos. Sin infierno del norte ni visita de la Vuelta a Francia, por culpa del coronavirus, pero con emoción y momentos de gran ciclismo. Un día excepcional, absolutamente histórico, para el equipo Ineos, cuyos líderes (Egan Bernal, Geraint Thomas y Chris Froome) no han logrado brillar esta temporada, pero que ha sabido recomponerse para protagonizar un Giro de Italia descomunal.
Hoy mismo, como se esperaba, Tao Geoghegan ha asaltado el primer puesto de la general. A sus 25 años ha conquistado el Giro de Italia ante Jai Hindley, que partía de líder hoy, pero que no ha podido retener la maglia rosa en la contrarreloj final en Milán. Geoghegan, que llegaba al Giro para ayudar a Thomas, sale de la carrera encumbrado como vencedor de la prueba. Hasta ahora, su mejor posición en una carrera de tres semanas fue la vigésima plaza que alcanzó en la Vuelta el año pasado. Además, es el primer corredor de la historia en ganar el Giro el último día sin haber vestido de rosa ni una sola etapa.
Pero es que, además de la victoria en la general, el Ineos se lleva de este Giro siete etapas. Es decir, una de cada tres etapas de la carrera. Una salvajada. Geoghegan ha sumado dos de esos triunfos, a los que hay que añadir el de Narváez y los cuatro (sí, cuatro) de Filippo Ganna, vencedor de todas las contrarrelojes del Giro y de una etapa en línea en la que protagonizó una memorable. escapada en solitario. Hoy ha vuelto a arrasar en la crono, sin rival alguno en la especialidad.
El día también ha sido glorioso para el Ineos en la Vuelta, donde Richard Carapaz se ha puesto líder en la ascensión a Formigal. Pero de eso hablamos un poco más abajo, porque merecen aparecer en esta crónica otros actores protagonistas del Giro, como Wilco Kelderman, que ha acompañado a Geoghegan y a Hindley en el podio final de la carrera. Y, por supuesto, también João Almeida, líder de la prueba durante 15 etapas, que hoy ha asaltado la cuarta posición, de la que ha desplazado a Pello Bilbao hasta la quinta plaza. Muy meritorio Giro ha hecho el ciclista vasco, sobre todo, teniendo en cuenta que llegaba del Tour, a diferencia del resto de favoritos.
Ha sido un Giro muy atractivo, que partía con pocos favoritos y que perdió a la mayoría de ellos a las primeras de cambios, como Geraint Thomas, Steven Kruijswijk o Simon Yates. Vincenzo Nibali ha hecho todo lo que ha podido, pero parece que su tiempo de disputar y ganar las grandes vueltas ha quedado atrás. Ha sido un Giro emocionante, con menos galones en la participación, es verdad, pero con alternativas hasta el final. De hecho, en las etapas finales ha habido sucesivos cambios de líder: de Almeida a Kelderman, de Kelderman a Hindley y de Hindley a Geoghegan. Un Giro que, igual que el resto de competiciones disputadas este año raro, ha sido un regalo para los amantes del ciclismo.
En la Vuelta no se ha podido subir el Tourmalet, pero sí se ha subido Formigal, donde ha habido cambio de líder y un auténtico festival de ataques. Por momentos parecía que en vez de una carrera ciclista real estábamos viendo un videojuego, porque los demarrajes se sucedían y no daba tiempo a ver todos los ataques que llegaban en el grupo de los favoritos.
La etapa tuvo dos etapas en una. De un lado, la lucha por la etapa, entre los miembros de la escapada del día, formada por Ion y Gorka Izagirre, Cattaneo, Henao, Guillaume Martin, Zimmermann, Verona, Rui Costa, Amezqueta Moreno, Power, Hundahl Valgren, Van Baarle, Woods, Jauregui, Cabedo, Arcas, Storer, Lafay, Nielsen, Perichon, Sütterlin, Cavagna e Hivert.
Hubo varios ataques entre ellos, pero el definitivo corrió a cargo Ion Izagirre, que se marchó en solitario en los kilómetros finales de la ascensión y ganó la etapa. Con este triunfo entra en el selecto club de ganadores de etapa en las tres grandes vueltas, ya que logró una victoria parcial el el Giro de 2012 y otra en el Tour de 2016.
En cuanto a la lucha por la general. comienzo del puerto se quedó descolgado Roglic, aunque después pudo reintegrarse en el grupo. La lluvia, el caos de tantos ataques y el hecho de que algún ciclista siguiera con los chubasqueros hacia difícil por momentos saber qué estaba ocurriendo en la carrera. Un día más, deseado las hostilidades el Movistar. Luego fue un no parar. Atacaron, entre otros, De la Cruz, Armirail y Gaudu a dúo, Marc Soler... . Pero el que lanzó el demarraje definitivo fue Carapaz, soberbio, que desveló la debilidad de Roglic, al que aventajó en más de 40 segundos en meta.
Tras la etapa de hoy, la Vuelta llega a su primer día de descanso con Carapaz como líder, con 18 segundos de ventaja sobre Carthy, hasta ahora, impecable en esta Vuelta; 20 segundos sobre Dan Martin, que ha aguantado más o menos bien hoy; 30 segundos sobre Roglic, hoy más débil, y 1:07 sobre Enric Mas, que llegó a meta en la estela de Roglic. Todo por decidir y muy abierto tras una primera semana reducida (la carrera empezó el martes) en la que hemos visto mucho ciclismo. Lo mejor es que, si el maldito coronavirus lo permite, aún queda mucho más ciclismo por delante en esta Vuelta, la última gran carrera ciclista del año.
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