Hoy ha sido un día intenso de ciclismo con tres carreras, tres. Para empezar, la Flecha Valona femenina; después, la tercera etapa del Tour de los Alpes, y como colofón, la Flecha Valona masculina. De esta última prueba se despedía hoy, o eso dice, Alejandro Valverde, quien tiene previsto colgar la bicicleta al final de esta temporada. La Flecha Valona, con el emblemático final en el Muro de Huy, es su carrera preferida, que ha ganado cinco veces y en la que ha sumado nueve podios contando con el de hoy. Porque, sí, hoy Valverde, Alejandro el Magno, ha vuelto a acariciar la victoria en la segunda clásica del tríptico de las Ardenas.
No llegaba en su mejor momento de forma y parecía difícil que el ciclista murciano del Movistar lograra estar en la pelea, ante rivales de la entidad de Julian Alaphilippe, Tadej Pogacar o Dylan Teuns, que ha sido el ganador final de la prueba. Pero lo de Valverde con la Flecha Valona es de otro planeta. Bueno, lo de Valverde es de otro planeta, a secas. A punto de cumplir 42 años, lo hará el lunes de la próxima semana, el corredor del Movistar sigue tuteando a chavales imberbes, continúa siendo protagonista destacado del pelotón internacional. Una leyenda viva que lo ha ganado todo pero no deja de divertirse encima de una bicicleta. Un corredor portentoso, con hambre insaciable de victorias.
Valverde le tiene tomada la medida a esta carrera, que es, todo hay que decirlo, máxima expresión del ciclismo YouTube mucho antes de que existiera YouTube. Es una carrera que sí o sí se decide siempre en las rampas salvajes del Muro de Huy. No es la carrera más apasionante desde la salida, pero sí tiene el final más emblemático y reconocible, el más exigente. Y en ese final, en ese muro de pendientes escandalosas, Valverde se siente como en casa. Domina y controla como pocos ese final. Hoy ha estado a punto de lograr su sexta victoria en Huy. Tan sólo un magnífico Dylan Teuns ha logrado superarlo en los metros finales. No pude más el murciano, que no se despide de su prueba fetiche desde lo más alto del podio, pero sí desde el segundo puesto, que es un lugar más que bueno para decir adiós a la prueba. Completa el podio Aleksandr Vlasov.
Antes del desenlace cantado, el del duelo concentrado en el Muro de Huy entre los favoritos, tuvieron su momento de gloria los componentes de la fuga del día (Armirail, Ferron, Guglielmi, Hulgaard, Impey, Janssens, Juul-Jensen, Reynders, Rolland y Wirgten) y también otros ciclistas que lo probaron en la parte final, como Simon Carr, que atacó a unos 35 kilómetros, o Rémy Rochas, Mauri Vansevenant y Soren Kragh Andersen, que lo probaron en la penúltima cota del día. Pero, un año más, el Muro de Huy dictó sentencia e impuso su ley. Ese Muro de Huy que echará de menos a Valverde el próximo año.
Antes de la disputa de la prueba masculina se corrió la Flecha Valona femenina, que además este año llega a su edición número 25. El desenlace de la carrera fue similar a la masculina, con la líder del Movistar, Annemieck Van Vleuten, acariciando la victoria y terminando finalmente segunda, al igual que hizo horas después Alejandro Valverde.
La primera escapada del día estuvo formada por Ragusa, Carbonari, Piergiovanni, Zanardi y Allin. A ellas se unieron después otras diez corredoras, entre las que estaban Chabbey, Thomas, Kastelijn, Spratt y Eric. La fuga afrontó el último paso por el muro de Huy con algo más de minuto y medio de ventaja sobre el pelotón, pero esa diferencia se fue consumiendo a pasos acelerados y a seis kilómetros del final fueron neutralizadas las últimas supervivientes de la escapada.
Se formó entonces un grupo selecto en el que entraron las principales favoritas. A tres kilómetros atacó Fisher-Black, después de que se moviera su compañera de equipo Moolman-Pasio. También el Movistar trabajó muy bien, con Sierra y Patiño al lado de Van Vleuten hasta el final. La ascensión final a Huy fue impresionante. Van Vleuten marcó su ritmo exigente desde el comienzo y fue dejando atrás a más y más rivales. Por momentos parecía que se iba a quedar sola, pero Marta Cavalli, que ya ganó la Amstel Gold Race, supo aguantar a la rueda de la corredora del Movistar. La ciclista italiana midió muy bien las distancias y ha adelantado a Van Vleuten casi en la línea de meta. Completó el podio Demi Vollering.
Mavi García terminó quinta y Ane Santesteban, novena.
Por si esto fuera poco ciclismo, hoy también se ha disputado la tercera etapa del Tour de los Alpes, en el que Pello Bilbao sigue líder. Hoy la etapa de la han jugado los mejores hombres de la escapada, en la que entraron Amador, Barta, C. Hamilton, Iribar, Kämna, Kudus, Lastra, Pronskiy, Rojas, Tesfatsion, Thompson y Træen. Por detrás, el Ineos intentó poner en apuros a Bilbao en el último puerto del día, pero el líder se mantuvo sólido. Bilbao resistió bien todas las embestidas. A 24 kilómetros atacó Miguel Ángel López, ya descartado para la general por el tiempo perdido el día anterior, pero no abrió camino. Mientras, en la escapada ya sólo quedaban en cabeza Pronskiy y Træen. Nada más empezar el descenso se cayó Træen, con lo que se despidió de cualquier opción de victoria.
Tras el reagrupamiento entre los fugados más fuertes en el descenso, asistimos a un final precioso, con constantes ataques y contraataques. Kämna, Amador, Lastra y Pronskiy se quedaron por delante en la parte final tras un gran ataque del primero. A falta de un kilómetro volvió a atacar Kämna y se fue tras él Amador. Eran los dos más fuertes de la fuga con diferencia. Amador lo intentó hasta el final pero no dio caza al corredor alemán del Bora, que se llegó una gran victoria, su segundo triunfo del año tras la etapa que ganó en la Vuelta a Andalucía.
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