De nuevo con mucho público, Utrecht ha vuelto a acoger el final de etapa de la Vuelta. En este caso, tras la victoria del Jumbo-Visma en la contrarreloj por equipos de ayer, ha sido turno para la primera etapa llana y el primer final al sprint de la carrera. En las etapas iniciales del Tour en Dinamarca se criticó, con razón, la falta de competitividad y la ausencia casi total de escapadas. No ha sido el caso hoy, gracias sobre todo a los equipos invitados, decididos desde el comienzo a asumir su rol de animadores de la carrera.
La primera escapada del día la han formado Pau Miquel Delgado (Kern Pharma), Julius van der Berg (EF), Thibault Guernalec (Arkea Samsic), Xabier Mikel Azparren (Euskaltel-Euskadi) y Jetse Bol (Burgos BH). Una vez fueron neutralizados, quien lo probó en solitario fue Luis Ángel Maté. El carismático corredor andaluz del Euskaltel-Euskadi plantará un árbol en Sierra Bermeja por cada kilómetro de esta Vuelta que pase escapado y ese plan de reforestación ha empezado del mejor modo posible, con una cabalgada en solitario que le ha mantenido en cabeza hasta que restaban unos 20 kilómetros para el final.
La tensión provocó varias caídas en los últimos kilómetros de la etapa y en ellas se vieron afectados, entre otros, Wout Poels, Roger Adriá o Gregor Mühlberger, quien se desgarró la parte derecha del maillot y llegó a meta garante malherido, o Stef Cras, del Lotto-Soudal, que se ha visto obligado a abandonar.
El sprint estaba cantado. Ha sido un tanto alocado, por la ausencia de trenos que dirigieran la marcha de los grandes velocistas. Se ha impuesto con autoridad Sam Bennett (Bora), que ha ganado la volata por delante de Mads Pedersen (Trek), vencedor del sprint intermedio, y de Tim Merlier (Alpecin).
El líder Robert Gesink ha entrado en meta con 43 segundos perdidos sobre el pelotón, por lo que ha perdido el maillot rojo que mañana portará su compañero de equipo Mike Teunissen, que ha entrado en la volata, en la que ha sido cuarto.
Mañana, tercera etapa, con salida y final en Breda y con un recorrido llano que invitará nuevamente a ver un sprint.
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