Martes, 16 de julio. Etapa 16. Vaison la Romaine- Gap. 168 km.
Tercera semana de carrera con la que concluimos el análisis del recorrido del Tour de Francia 2013. La etapa 16, la posterior al segundo día de descanso, presenta un perfil montañoso que a más de uno se le puede atragantar. Salvando las distancias, me recuerda a la etapa en la que Contador revolucionó la Vuelta 2012 y ganó la carrera. También era un día posterior a la segunda jornada de descanso y también con un perfil de media montaña con puertos de segunda. En este caso, dos cimas de segunda categoría y una de tercera. El Col de Manse, de segunda, se encuentra a 11,5 kilómetros de la línea de meta en Gap.
Miércoles, 17 de julio. Etapa 17. Embrun-Chorges. 32 km.
El mayor equilibrio en kilómetros contrarreloj que presenta la edición de este año respecto al precedente se refiere no sólo a que las cronos sean menos largas de lo habitual en el Tour (32 kilómetros, en este caso) sino también al perfil de esta segunda prueba cronometrada individual, pues incluye dos puertos de segunda. No es, por lo tanto, precisamente una contrarreloj clásica. Primero se subirá la Côte de Puy-Saniéres. Tras el descenso de este puerto, llega la subida a la Côte de Réallon, también catalogada de segunda categoría. Después, descenso hasta meta. Sin duda, será una jornada de gran importancia para el desenlace de la ronda gala.
Jueves, 18 de julio. Etapa 18. Gap-Alpe d´Huez. 172,5 km.
Etapa reina del Tour del centenario. La 18º etapa de la grande boucle es un auto homenaje que la carrera ciclista más importante del mundo se hace a sí misma. Un regalo a sus aficionados de todo el mundo. Lo tiene todo para ser un día memorable de ciclismo, para pasar a la historia que, año a año, se va escribiendo sobre este acontecimiento deportivo de primer orden que es el Tour. Doble ascensión a Alpe d´Huez. ¿Existe un atractivo mayor? ¿Se puede ofrecer más en una sola etapa? El Col de Manse ( de segunda), el Rampe du Motty (de tercera) y el Col d´Omon (de segunda) componen los primeros 95 kilómetros de la etapa. A partir de ahí, descenso al mencionado puerto de segunda categoría y traca final. Primera subida a Alpe d´Huez, santuario de este deporte, lugar de peregrinación, templo del ciclismo. Subia al Col de Sarenne (segunda) y descenso para regresar al puerto donde tantas leyendas se han escrito sobre una bicicleta. Alpe d´Huez como juez de la edición 100 del Tour. ¿Quién mejor? Eso sí, quedarán otras dos jornadas de alta montaña donde se seguirá viendo batalla si la carrera no llega sentenciada a estas alturas.
Viernes, 19 de julio. Etapa 19. Bourg d´Oisans-Le Grand Bornard. 204,5 km.
Otro gran día de ciclismo de alta montaña. Otra gran jornada alpina. Dos puertos de categoría especial (Col du Glandon y Co de la Madeleine) en la primera parte de la decimonovena jornada del Tour. Después, quedarán otras tres ascensiones. El Col de Tarmié (de segunda), el Col d l´Epine (primera) y el Col de la Croix Fry con la cima a 13 kilómetros del final de la etapa. Para no perdérsela desde el principio.
Sábado, 20 de julio. Etapa 20. Annency/ Annecy-Semnoz. 125 km
Última ocasión para dirimir cuantas batallas queden pendientes en la vigésima etapa etapa del Tour. Por todo lo alto, además, en Annecy-Semnoz, de categoría especial, con la subida previa al Mont Revard y cuatro cotas endureciendo la carrera desde la salida (tres de tercera y uno de segunda). Todo eso en apenas 125 kilómetros de recorrido. Subir y bajar permanentemente, encadenar ascensiones una detrás de otra. Lo que no esté claro antes de la disputa de esta etapa habrá de dirimirse en las rampas de los últimos puertos que se subirán en el Tour número 100.
Domingo, 21 de julio. Etapa 21. Versalles-París, Campos Elíseos. 133,5 km.
De noche, en torno a las 22 horas, concluirá esta edición especial del Tour de Francia. En el mismo escenario de siempre, eso no puede cambiar jamás, en los Campos Elíseos de la capital francesa con París engalanada para la ocasión, con vestido de noche. La luna parisina será espectadora de excepción del final de tres semanas de emociones despertadas por el ciclismo, por un símbolo del país galo desde hace 110 años. Final de la edición 100 y comienzo de la cuenta atrás para la edición 101. C´est la vie. C´ est le Tour.
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