Se suele decir, y es verdad, que en las carreras ciclistas es aún más importante que el recorrido la actitud de las corredoras, pero el recorrido, claro, importa. Hoy en la prueba en línea femenina de los europeos de Limburgo ha habido mil y un intentos de evitar el sprint, pero el recorrido no era lo suficientemente duro como para que triunfara una fuga. La selección neerlandesa de Lorena Wiebes, la gran favorita, controló a la perfección la carrera para desembocar en un sprint en el que, en efecto, se impuso ella, que ya fue campeona de Europa hace dos años.
La selección española ha tenido espacial protagonismo en la carrera. Primero, con Mireia Benito, quien ha sido cabeza de carrera en solitario durante unos cuantos kilómetros. Después, con Sara Martín, que atacó a falta de 30 kilómetros del final. También en solitario, llegó a tener cerca de medio minuto de ventaja, pero fue cazada a falta de 13 kilómetros para la meta.
Se sucedieron a lo largo de la prueba los ataques, sobre todo, en los en distintos ramos adoquinados, pero ninguno de ellos escapó al férreo control de la selección neerlandesa. A un ataque de la suiza Elise Chabbey respondió de inmediato la neerlandesa Ambert Kraak. Y así con cada nuevo movimiento. Hoy la selección naranja ha corrido como un auténtico equipo, algo que no es siempre lo común. Bélgica lo probó varias veces, como con los sucesivos ataque de Marion Norbert Riberolle y de Valerie Demey a algo más de 30 kilómetros de meta. Nada. Tampoco cuajó el movimiento de la alemana Lianne Lippert.
El sprint final se lo ha llevado con gran autoridad Lorena Wiebes por delante de la italiana Elisa Balsamo y de la polaca Daria Pikukik, que la han acompañado el el podio final,
En la prueba junior masculina, el español Héctor Álvarez se ha proclamado subcampeón de Europa junior en ruta, por detrás de Felix Orn Kristoff, hermano pequeño de Alekxandr Kristoff. Mañana será la prueba en línea élite masculina.
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