Más montaña

El temido y peligroso Crostis quedará finalmente en los planes iniciales de la organización del Giro de Italia, ya que ayer se confirmó que no se va a subir ni bajar este puerto. De este modo, la etapa de hoy empezará con una hora de retraso sobre el horario previsto y llegará, tal y como estaba planeado, al Zoncolan. Los equipos se habían puesto en pie de guerra ante la peligrosidad del descenso del Crostis y la organización no ha tenido más remedio que, muy a su pesar, eliminar este puerto. Otro año será si se logra que se den las condiciones mínimas para poder hacer pasar por ahí al pelotón del Giro de Italia. El perfil definitivo de la etapa de hoy queda con el resto de recorrido que estaba previsto salvo el ascenso al Crostis. Ésta es la noticia de un día en el que, a espera de lo que suceda en la etapa de hoy, el comentario debe ser para el dominio aplastante de Alberto Contador en esta corsa rosa.

Ayer vivimos la décimotercera etapa del Giro con la llegada de nuevo de la alta montaña. Los italianos esperaban que se demostrara que sus corredores, en especial Nibali y Scarponi, sólo habían tenido un mal día en el Etna, pero lo cierto es que Contador atacó desde más lejos en el día de ayer y sacó más distancia a sus rivales. Tanto es así que hacer un repaso a la general resulta el modo más rápido y claro de comprobar hasta qué punto Contador está por encima del resto. 3:09 es la distancia que separa a Alberto Contador, líder de la carrera, del segundo clasificado, Vincenzo Nibali. El tercer lugar lo ocupa en estos momentos Michele Scarponi a 3:16. Excelente la cuarta plaza para David Arroyo, quien está a 3:25 de Contador y muy cerca de poder optar hasta el final a un nuevo podio en el Giro, que está demostrando que es su carrera predilecta, en la que más y mejor rinde y en la qe logra estar al lado de los mejores en las duras ascensiones que toca afrontar en esta competición.

Quinto es Kreuziger a 3:29, sexto está Sivtsov a 3:53. La dureza de este Giro hace que la parte alta de la clasificación general se vaya llenando de escaladores. Así, en la séptima plaza está situado Igor Antón, quien ayer logró sacar algún segundo al resto de aspirantes al podio. Su equipo hizo un buen trabajo y fue una lástima que luego no se pudiera rematar con un triunfo de etapa. Habrá que buscarla de lejos o de algún modo que Rujano y Contador, los dos más fuertes para arriba en este Giro, no se adueñen del triunfo parcial. Antón está a 4:02. Octavo es Gadret, que ayer también sacó tiempo al resto de rivales con un ataque en la parte final de la ascensión, a 4:06. Mateo Carrara se encuentra noveno a 4:35 y cierra el top ten Dupont a 4:38. Joaquím Rodríguez es el tercer español mejor clasificado a 5:26 de Contador en la décimocuarta plaza. Ayer se dejó algo de tiempo con el resto.

La etapa fue dura sobre todo para el Euskaltel Euskadi, ya que se formó una fuga delantera numerosa en la que no entró ningún corredor del equipo vasco. Eso nunca gusta a los directores y entre eso y que Antón es un inmenso escalador que tenía ayer aspiraciones de triunfo, el equipo tuvo que trabajar duro para echar abajo la escapada. Cuado llegaron las rampas del último puerto del día, se vio que Antón no iba a poder seguir el ritmo de Contador y Rujano que, nuevamente y como el que no quiere la cosa, se quedaron solos en cabeza. No había más. Por detrás Scarponi, que al menos intentó seguir la rueda de Contador, y Nibali, que hoy por hoy no puede alcanzar el nivel del ciclista español, eran los dos más destacados de un grupo en el que nadie se veía con fuerzas o con ganas para tirar y evitar que la distancia de Contador aumentara. Y aumentó, vaya si aumentó.

Sólo Gadret primero, en compañía de Dupont, y Antón después saltaron del grupo de aspirantes. Daba la sensación de que los demás se estaban reservando para futuras batallas. O eso, o que no tenían fuerzas. Otra posibilidad, muy probable, es que crean que lo que de verdad está en juego en este Giro para ellos es la segunda plaza. Desde luego parece que si todo sigue su cauce normal, Alberto Contador se adjudicará este Giro. Está claro que los aspirantes a quitarle la maglia rosa deben intentar algo distinto. Esperar al último puerto para atacarle es imposible, pues ni siquiera son capaces de seguir su ritmo. Deben intentar algo diferente, fuera de lo normal, si quieren tener alguna opción de optar al primer puesto. La batalla por el segundo será muy atractiva, pero no creo que los italianos vayan a despedirse tan pronto de la posibilidad de intentar algo para arrebatarle a Contador el maillto de líder.

Queda mucha montaña por delante "por desgracia" para Contador, según él mismo dijo y por suerte para los aficionados. David Arroyo declaró ayer que se volvió a ver a un Contador intratable. José Rujano, vencedor de la etapa, declaró tras entrar en meta que "Contador es un ciclista tremendo, difícil de aguantar" El español decidió no disputarle la etapa al venezolano. Un escalador aguerrido que es el único que está pudiendo resistir el ritmo infernal de Contador cuando baila encima de la bicicleta. Veremos si los italianos tienen guardado un as en la manga o si se conforman con buscar un puesto en el podio o alguna victoria de etapa.

Hoy sigue la montaña, sin el Crostis pero con el Zoncolan, y mañana también habrá final en alto. El lunes llegará la peligorsa jornada de descanso, más aún si tenemos en cuenta que el martes habrá una cronoescalada y siempre hay algún corredor al que el descanso no le sienta del todo bien antes de un día decisivo. La próxima semana también habrá más montaña, por lo que se podría decir que se tiene la sensación de que Contador ha sentenciado el Giro. Si afirmamos esto teniendo en cuenta todo lo que falta no es tanto por la diferencia de tiempo que saca al resto de aspirantes, sino por la superioridad que está demostrando el pinteño. En todo caso, queda mucho Giro por delante y es pronto para cantar victoria.

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