Disputadas las dos primeras etapas de la 98 edición del Tour de Francia, el comienzo de la carrera ha dejado un susto importante para Alberto Contador, Samuel Sánchez y varios corredores del Movistar, y también una crono por equipos con menos diferencias de las esperadas. La primera etapa no era un prólogo, sino una etapa en línea y el gran favorito para vencer y vestirse de líder, Philipe Gilbert, no defraudó en un emocionante final en la que vimos un duelo entre dos de los mejores ciclistas del momento, Fabian Cancellara y Gilbert, amén de ver cómo Cadel Evans llega a este Tour con muchas ganas y con buenas piernas. Eso sí, la gran noticia del primer día de carrera fue una caída provocada por un espectador despistado que hizo que el pelotón se cortará en dos y que muchos corredores quedarán retrasados.
Antes habíamos presenciado la salida y el paso por el Passage de Gois, precioso y atractivo lugar que esta vez se transitó de forma neutralizada, aunque también de este modo hubo alguna caída. El caso es que el Tour arrancaba y se dieron pronto las primeras caídas y se vieron las primeras escenas de nervios por colocar bien a los líderes y por disputar la primera etapa ya que tenía triple premio: la etapa, el maillot de líder y el maillot de líder de la montaña ya que acababa en un puerto de cuarta categoría que hizo que los esprinterse puros tuvieran poco que hacer ante el potentísimo Gilbert. Después de sus exhibiciones en las grandes clásicas de la primavera, el corredor del Omega Pharma Lotto era el máximo favorito para lograr la victoria. No decepcionó y se vistió de líder. Nadie pudo seguirle y hacerle frente, nadie puso en riesgo cierto su triunfo a pesar de los ataques previos de Vinokourov y de Cancellara.
Esta temporada está siendo, sin duda, la mejor de toda su carrera para Gilbert. Es el mejor corredor en este tipo de recorridos, tal y como demostró en las clásicas. Es un ciclista tipo Alejandro Valverde. Desde luego, fue todo un espectáculo verle atacar y buscar vestirse de líder. Se sabía que ese maillot amarillo le iba a durar poco, debido a la debilidad de su formación en la crono por equipos del domingo, pero el primer golpe estaba dado y se habían cumplido las previsiones, algo que no siempre es fácil. Cuando un corredor parte como gran favorito, suele ser más complicado vencer, al no contar con el factor sorpresa y saber que todo el mundo está pendiente de ti. Si Gilbery ha sido el gran triunfador de la primera parte de la temporada, antes del Giro, ahora quiere seguir teniendo prescencia y lo ha logrado con su excepcional triunfo en la primera etapa del Tour.
Gilbert merecía ocupar gran parte de los comentarios de todos los que seguimos la primera etapa del Tour desde casa o desde donde sea, pero lo cierto es que, como también es lógico por otra parte, la caída numerosa y montonera que se organizó debido a ella centró gran parte de la atención de esta primera etapa. Atrás, en el grupo que sufrió las consecuencias de esta caída, quedó el mejor ciclista del mundo, Alberto Contador. Tanto él como Samuel Sánchez, el otro español que busca hacer un gran puesto en la general del Tour, quedaron atrás y se vio rápido que, a tan sólo nueve kilómetros de meta y con la lucha por la victoria de etapa en su punto culminante, iba a ser misión imposible no perder tiempo. La duda estaba en saber cuánto iban a perder en relación al resto de favoritos, todos en el grupo de cabeza. Más tarde hubo otra caída y Andy Schleck perdió contactó con el grupo pero, al ser dentro de los tres últimos kilómetros de la etapa, no considerada de montaña por la organización, se le dio el mismo tiempo que al grupo de cabeza.
Más de un minuto perdió Contador en relación el resto de favoritos. Son cosas que pasan. El hecho de que Contador fuera el único gran favorito que padeció las consecuencias de la caída es cuestión sólo de mala suerte. Schleck dijo en meta que no se trata sólo de dar pedales sino también de la colocación. En fin, la caída fue en la parte delantera del pelotón y no creo que algo más allá de la mala fortuna pueda estar detrás de esa pérdida de tiempo. Con ella surgía una pregunta pertinente, más aún tras haber perdido ayer un poco más de tiempo el Saxo Bank, ¿hay otros corredores que son ahora más favoritos que Contador por ese minuto y medio que tienen de ventaja con respecto al español? No lo sé. Algo está claro: el año pasado la distancia entre el ganador del Tour y el segundo fue de tan sólo 39 segundos y lo perdido en la primera etapa es mucho más que eso. Contador tendrá que ir a atacar, pero creo que decir a estas alturas que el Tour está muy difícil es algo exagerado. Es cierto que ese tiempo costará mucho recuperarlo, pero queda también mucha carrera por delante.
Ayer era el turno de la crono por equipos y allí estuvo el Saxo Bank saliendo primero para intentar lograr marcar un buen tiempo y evitar que el Leopard les sacará mucho tiempo elevando la distancia entre Contador y Schleck. De excepcional, al menos de muy buena, se puede calificar la contrarreloj que hizo el equipo de Contador. Sin un bloque especialmente bueno para esta especialidad, todos y cada uno de los corredores lo dieron todo y consiguieron un gran resultado al perder tan sólo 23 segundos con el todopoderoso Leopard de Schleck. Poco más de un segundo por kilómetro. Buen tiempo para el equipo de Contador. El triundo en la etapa fue para el Garmin Cervelo, uno de los favoritos, y Hushovd se viste de líder. A 1:38 está ahora Contador de Schleck.
Queda mucho Tour por delante, queda casi todo el Tour. Es verdad que el comienzo podría haber sido mejor, pero no es nada nuevo que en las primeras etapas de la ronda gala haya caídas. Esta vez le tocó la mala suerte a Contador, a Samuel Sánchez y a corredores como Beñat Itxausti, corredor del Movistar, que sufrió una caída y que ayer era incluso duda para la crono. Se llegaron a plantear que podría tener que dejar la carrera, pero logró seguir y ojalá pueda recuperarse poco a poco en los próximos días. Hoy toca la primera etapa propicia, a priori, para los esprinters. Esto no ha hecho más que comenzar.
Comentarios