Un favorito y varios aspirantes

Alberto Contador es para todo el mundo el gran favorito a ganar el Tour de Francia que comienza mañana. En la lista de favoritos a ganar la carrera gala, es él a quien todos los aficionados ven como referente. Además, sus rivales le consideran como el más claro favorito a la victoria final, así como los directores de equipo. Contador insiste que su estado físico es una incógnita y que no lo pasará muy bien las primeras etapas. Viene de disputar (y ganar) el Giro de Italia y es un hecho que el desgaste físico fue, a pesar de que pareciera que ganaba con facilidad, enorme. El ciclista español será, en todo caso, la primera referencia de una carrera que contará, un año más, con la mayoría de los mejores ciclistas del mundo.

Andy Schleck es el rival principal de Contador. Tanto es así que muchos creen que este Tour será un duelo a dos, una batalla entre primero y segundo del año pasado, un cara a cara entre el mejor ciclista del mundo y el que aspira a ocupar su trono en París. El luxemburgués dice contar con mejor equipo que Contador, y es posible que así sea, y además se ha preparado expresamente para esta carrera. Contará con la ayuda de todo su equipo, entre ellos de su hermano Frank. ¿Será este Tour cosa de dos? Lo podremos decir cuando vaya avanzando la carrera, pero ahora deberíamos contar con otros corredores que buscarán hacerlo bien en la ronda gala.

Es el caso de Evans, ante su última oportunidad de ganar la carrera más importante del mundo. También de Basso, cuyo estado físico genera ciertas dudas, o de Kloden, que este año se está mostrando muy bien y que cuenta con un auténtico equipazo para afrontar la carrera francesa. Corredores como Gesink parten también con aspiraciones de podio. No podemos olvidar tampoco al líder del Euskaltel, Samuel Sánchez, ni al buen equipo que lleva el Movistar, con David Arroyo al frente. Si a esto se suma que estarán los mejores corredores en contrarreloj, como Cancellara, los mejores esprinters y gente como el gran Gilbert, este Tour promete emociones fuertes. A partir de mañana, lo viviremos.

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