Se acaba el año y con él la espera de volver a disfrutar del ciclismo de competición. Las primeras carreras del año llegarán en breve y las noticias de estos días se centran, sobre todo, en la planificación de la temporada de los distintos ciclistas. Hay quienes desearían poder estar haciendo planes para 2012, pero no pueden porque todavía no tienen equipo. Hablo del bloque del Geox, que finalmente no encontró en Venezuela la esperada tabla de salvación y está luchando con sus últimas fuerzas por mantenerse en el pelotón internacional la próxima temporada. No sólo los ciclistas de esta escuadra se encuentran sin equipo. Hay más casos de grandes ciclistas que, a día de hoy, saben que tendrán muy difícil hallar acomodo en alguna formación para la próxima temporada.
La UCI, siempre innovando en favor del ciclismo, ha impuesto un incomprensible nuevo sistema de puntuación para elegir a los equipos de élite de tal forma que se deja sin valor la imprescindible labor de los gregarios. Su papel es clave, pero no da puntos. Es por ello que hay equipos que están optando por contratar a ciclistas de segundo nivel, pero con puntos para intentar así lograr una elevada puntuación. Un ejemplo de esta situación es Luis Pasamontes, que se encuentra sin equipo.
En relación al Geox, nadie podrá decir que Matxin no está haciendo todo lo que está en sus manos para intentar encontrar una salida al problema en el que metió al equipo la actitud de la marca patrocinadora, que decidió de buenas a primeras dejar plantado al equipo ciclista y dejar en el aire la situación de muchos trabajadores cuyo futuro laboral es muy incierto. En este equipo está el flamante ganador de la Vuelta Ciclista a España, Juan José Cobo. Él había firmado poco antes del plantón de Geox el que seguramente habría sido el contrato de su vida. Cuando la marca se fue, el gran corredor se quedó, como el resto de compañeros, en una situación de dudas e incertidumbres. Cobo, que demostró su grandeza profesional en la Vuelta, está demostrando estos días se grandeza humana. El Movistar le ha ofrecido un contrato para la próxima temporada y él, de momento, prefiere esperar a ver qué sucede con el Geox. Ojalá Matxin encuentre salida. Si no es así, Cobo acabaría en el equipo de Unzúe donde se encontraría con Alejandro Valverde el año de su esperado regreso.
La Vuelta Ciclista a España es la gran carrera ciclista que más tarde se celebra y, quizás por ello, la presentación de la edición del año próximo se hace siempre esperar. Ya sabemos cómo serán el Giro y el Tour de 2012, pero para conocer todos los detalles de la carrera española habrá que esperar al 11 de enero. El Palacio de Congresos y Auditorios de Navarra acogerá el acto de presentación. La Vuelta comenzará el 18 de agosto y concluirá el 9 de septiembre, consolidando así la apuesta de Unipublic por adelantar el inicio de la ronda española para atraer al público que esté a finales de agosto de vacaciones. Se saben algunas cosas, como el previsible paso por el País Vasco tras el arrollador éxito del regreso de este año, y que Canarias quedará, como mínimo, para 2013. Suena el regreso a la Bola del Mundo. El miércoles 11 de enero saldremos de dudas, aunque el director de la Vuelta anticipa ya que la Vuelta 2012 será muy explosiva.
Un fichaje sonado, precisamente proveniente de las filas el Geox, ha sido el de Denis Menchov por el Kathusa. El equipo ruso está haciendo una apuesta dedidida por este deporte y, como es lógico, intenta reunir en sus filas a los mejores corredores de aquel país. Menchov estaba predestinado a llegar a esta escuadra en la que compartirá galones con el español Joaquim Rodríguez. Hablar de Menchov es hablar de alguien que, no lo olvidemos, ha ganado dos Vueltas y un Giro. Es cierto que no está claro que el corredor ruso pueda volver al mismo nivel que hace unos años, pero será interesante seguirle en este equipo. Su gran objetivo para 2012 será el Tour, única grande que se le resiste. Lo que pasa es que el Tour son palabras mayores. Pensaba también esto cuando leí unas declaraciones de Luis León Sánchez en las que decidía que el Rabobank tenía que aspirar a todo en 2012, también a ganar el Tour.
De Rabobank salió, de mala manera porque el equipo se podía haber portado mejor con él, el español Óscar Freire que afronta el que quizás sea su último año como profesional. Ya que Freire salía de Rabobank, muchos soñamos con que pudiera competir en un equipo español, pero finalmente fue el Kathusa el equipo que se hizo con sus servicios. El esprinter cántabro tiene definido su calendario. 2012 es un año olímpico, por lo que los Juegos, junto al Mundial, serán sus grandes objetivos. Por supuesto, Freire también buscará seguir haciendo historia en otras competiciones como la Milán San Remo, adonde irá en busca se su cuarto triunfo. También correrá este próximo año el Tour de Francia.
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