Castroviejo (Movistar), primer líder de la Vuelta


Como se esperaba, Pamplona fue una fiesta. La primera etapa de la Vuelta 2012 nos dejó imágenes de gran belleza, con los equipos pasando por el recorrido de los Sanfermines y terminando en una plaza de toros con miles de aficionados disfrutando del espectáculo. La ciudad se volcó con la carrera y fue un extraordinario inicio para la Vuelta. Ojalá sea preludio de un gran seguimiento de público allá donde va y de que vamos a presenciar un atractivo espectáculo deportivo como todos esperamos. El primer comentario de la crónica, sin lugar a dudas, debe ser para esa respuesta de la ciudad de Pamplona. Un valor seguro hablando de ciclismo. Sensacional.

Fue preciosa la etapa y el paso de los equipos por la calle Estafeta y el resto de calles del recorrido de los encierros de San Fermín, cuyo empredado hizo mucho daño a la mayoría de las escuadras. La contrarreloj por equipos se hizo dura para muchas formaciones. El equipo Rabobank marcó el mejor tiempo en meta y así fue aguatando el paso de escuadras poderosas que eran favoritas a la victoria. Se acercó mucho Sky, a dos segundos, marcaron el mismo tiempo otros equipos como el Omega Pharma Quick Step (en este caso, mejor por décimas en la clasificación oficial final) o el BMC, pero siguieron resistiendo y ahí estaban sus corredores, sentados a la espera de que ningún equipo mejorara su tiempo para subir al podio como ganadores de la etapa y vestir a Lars Boom como primer líder.

Pero el último equipo en pasar por meta, el último que salio puesto que era el equipo de vencedor del año pasado (Juanjo Cobo), corría en casa y con un bloque sólido, fortísimo y motivado. Pocos le daban como favorito, pero el Movistar tenía otros planes. Querían comenzar de la mejor forma posible y salieron a darlo todo en el recorrido de 16,5 kilómetros. Fueron muy fuertes. Marcaron un buen tiempo en el punto intermedio del kilómetro ocho establecido por la organización a cuatro segundos del mejor allí, el Sky. Iban en condiciones de ganar. Hicieron una crono formidable y, en efecto, lograron la victoria. Primera etapa y, por consiguiente al ser una contrarreloj por equipos, primer liderato para Jonathan Castroviejo, que fue el primero en cruzar la línea de meta y ayer, para no variar, iba fortísimo.

Creo que es unánime la sensación entre los aficionados al ciclismo de que era difícil imaginar otro comienzo mejor para la Vuelta que éste, con el triunfo de un conjunto español y, además, con el joven ciclista que maravillo a todos en los Juegos Olímpicos y en el que tenemos puestas muchas esperanzas de futuro, porque tiene mucha clase y un gran nivel, vestido de líder. El primer maillot rojo para Castroviejo es una imagen sensacional y muy merecida también para él y para el Movistar, equipo al que tenemos un cariño especial por todo lo que supone de ser la continuación de una formación histórica de grandísimos campeones en los últimos años, porque tiene una plantilla formidable, llena también de jóvenes muy valiosos, y también porque es la apuesta por el ciclismo de una gran marca, la empresa telefónica que patrocina esta formación, en un momento en el que actitudes así se agradecen muchísimo.

Castroviejo era ayer el más feliz del pelotón, naturalmente. Pero también estaban contentos otros corredores. Hizo buena crono el Saxo Bank de Contador, a 14" del Movistar, al igual que el Sky de Froome, a 12"; el Kathusa de Joaquim Rodríguez, a 15"; o el Euskaltel_Euskadi, noveno a 28" pese a que las cronos por equipos jamás han sido su especialidad y es una disciplina en la que suelen pasarlo mal.



Esto no ha hecho más que empezar. Hoy, segunda etapa entre Pamplona y Viana con final en un repecho que puede animar el desenlace de la jornada. 181, 4 kilómetros con mucho calor, por cierto, por tierras navarras como casi en la totalidad del país.

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