El presidente de la Unión Ciclista Internacional (UCI) ha publicado una carta abierta a los corredores en la que les cuenta las medidas que este organismo ha tomado "en respuesta a la crisis actual de nuestro deporte". Dice que el ciclismo está más limpio que nunca, y para ello utiliza declaraciones de ciclistas como Gilbert o Cavendish. Saca pecho, además, sobre la postura de la UCI en la lucha contra el dopaje, asegurando que "siempre ha sido pionera" en esta batalla.
Un aspecto de la carta que celebro sinceramente es el expresado en la siguiente frase: "somos conscientes de que este extenso programa antidopaje les causa muchos
inconvenientes y queremos agradecerles el haber aceptado estas molestias para el
bien del ciclismo". Al menos, suena a cierta empatía con los ciclistas, a cierto interés (veremos si real o no) por reconocer el valor que en este deporte tienen sus auténticos protagonistas. Porque la única pieza insustituible del ciclismo son los ciclistas, junto a los aficionados, naturalmente.
Pero, viene a decir, las medidas adoptadas hasta ahora no son suficientes. Se dieron cuenta de ello cuando vieron el informe de la USADA sobre Armstrong y su equipo. En ese punto, llama a redoblar los esfuerzos en la lucha contra el dopaje poniendo el balón en el tejado de los ciclistas: "al final del día, son ustedes, los corredores, los que tienen la última palabra
para decir si nuestro deporte está limpio". Después anuncia que "la UCI estudiará la creación de una nueva línea abierta, una línea directa
confidencial". Una línea a la que los ciclistas podrán llamar para hablar de asuntos de dopaje.
Sobre la respuesta al caso Armstrong, anuncia en la carta lo que ya sabíamos: "para garantizar que la UCI y el ciclismo puedan avanzar contando con la
confianza de todas las partes, creamos ahora una Comisión totalmente
independiente para examinar las conclusiones del informe de la USADA y hacer
recomendaciones que permitan a la UCI restablecer la confianza en el ciclismo". Eso sí, dice que será independiente pero después afirma que "estamos seguros de que la Comisión llegará a la conclusión de que la UCI es
desde hace años una de las federaciones deportivas más severas en la lucha
contra el dopaje".
También anuncia a los ciclistas en esta carta abierta otra de las medidas de las que venimos hablando estas últimas semanas. "Por último, pienso que también es importante que la UCI se ocupe de
restablecer la credibilidad del ciclismo durante el tiempo que la Comisión
Independiente realice su tarea. Por eso he decidido que en el primer trimestre
de 2013 la UCI ponga en marcha un proceso de consulta de gran alcance que
abarque a todas las partes interesadas del ciclismo, para tratar algunos asuntos
que nos preocupan en este deporte y trabajar juntos a fin de crear un futuro
brillante para el ciclismo".
Termina diciendo que esta no es la primera vez que el ciclismo tiene problemas, pero "las partes interesadas y los seguidores de este deporte pueden estar seguros de
que el ciclismo encontrará el camino para seguir adelante". "Juntos podremos mantener viva la popularidad del ciclismo y asegurar un
brillante porvenir a este deporte", concluye McQuaid su carta.
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