Bakelants triunfa y Froome se mueve

Jan Bakelants no había conseguido hasta ayer ninguna victoria como ciclista profesional. El corredor belga logró, a la vez, adjudicarse la segunda etapa del Tour de Francia y vestirse de amarillo. Etapa y liderato para él. Triunfo parcial y gloria al frente de la general. Honores como líder e inmejorable comienzo para su equipo, el RadioShack-Leopard. Todos los focos deberían ser para él, todos los comentarios deberían centrarse casi en exclusiva en su formidable resolución de una etapa nada sencilla, ni más ni menos que desafiando con éxito al pelotón, donde venía esprintando como si no hubiera mañana el eslovaco Peter Sagan. Victoria, pues, de muchos quilates la lograda por el corredor belga. Pero Chris Froome comparte protagonismo y comentarios, ya que el corredor británico de origen keniata atacó para sorpresa de todos en la Cota de Salario, de tercera categoría, la última ascensión de la jornada.

El Tour llegaba a la ciudad natal de Napoleón (Ajaccio) y Froome no quiso esperar más para mostrar su imagen imperial. Con un arrebato que casa más bien poco con la concepción conservadora y de control de la carrera del equipo Sky, el ciclista británico, centro de todas las miradas, máximo favorito a la victoria final, se movió en un puerto de tercera. Con rampas exigentes, sí, pero una cota de tercera, al fin y al cabo. En la segunda etapa de carrera, con todo el Tour por delante. Un movimiento inesperado por parte de un aspirante a la general, qué decir si quien lo protagoniza es Froome. No son amigos en el equipo británico de este tipo de alardes, pero el corredor de origen keniata lo probó, dio riendo suelta al corazón dejando a un lado los fríos cálculos estadísticos y las estrategias conservadoras. 

No logró rentas finalmente, ya que fue neutralizado por el pelotón, pero al menos sí demostró ya que se encuentra pletórico, exultante. Tanto como para atacar, lo nunca visto, en la segunda etapa. El resto de favoritos se llevó un buen susto por el calentón de Froome, sin duda uno de los grandes momentos de la etapa. El segundo día por tierras corsas, mucho más atractivo y menos accidentado que el primero. El ataque de Froome, por sorprendente, fue uno de los movimientos más comentados por todos los aficionados (TT en Twitter durante un buen rato), pero la etapa tuvo otros puntos de interés. 

Al principio de todo, con la formación de la fuga de día. Veilleux (Europcar), Kadri (Ag2r), Lars Boom (Belkin) y Rubén Pérez (Euskaltel-Euskadi). Repitió Boom  y repitió el conjunto vasco, segundo día de dos posibles con presencia en la escapada. El Col de Vizzanova, de segunda categoría, trajo consigo nuevos movimientos como el ataque de Thomas Voeckler o el intento posterior de su compañero de equipo, Pierre Roland. Sobre todo, la primera ascensión de nivel de esta edición del Tour provocó que la mayoría de los velocistas más potentes y menos dotados para superar este tipo de puertos (Cavendish, Greipel, Kittel, Goss. Kristoff...) se descolgaran. Demasiado duro para ellos. 

Neutralizados los últimos intentos de fuga, restaba por superarse el puerto de tercera categoría en el que, como decimos, Froome ha dado la sorpresa. Tras ser cazado el líder del Sky y ya en el llano,  Fuglsang, Gorka Izagirre, Flecha, Chavanel,  Mori y Bakelants tomaron unos metros de ventaja sobre el pelotón. Nunca más de 10" de ventaja. Final trepidante. Por detrás, cierta indecisión. ¿Quién hacía el trabajo de neutralización? El resto de equipos no le veía la gracia a tirar del pelotón para cazar a los escapados, sabedores de que le estarían haciendo el trabajo a Peter Sagan. Cannondale no tenía demasiados efectivos para tirar, mermado como estaba la escuadra italo-norteamericana por el paso de la cota de tercera. Entró a colaborar Garmin, se rehízo algo Cannondale. Todo por decidir. Máxima tensión. 

A un kilómetro para el final, Bakelants fue el más valiente y optó por jugársela por delante. Atacó y se marchó solo por delante. La duda era si sería suficiente para ganar. Estaba claro que o lograba la victoria o moría en la orilla tras nadar con denodados esfuerzos. Ya en la recta de meta, sus compañeros eran cazados por el pelotón, donde Sagan venía lanzando el esprín. Al final, el corredor belga del RadioShach-Leopard pudo mantener la distancia suficiente para ganar la etapa al eslovaco y, además, para sacar un segundo de ventaja, tiempo más que suficiente para ser el nuevo líder de la carrera. Primer triunfo como profesional, decimos, que llega después de unos problemas físicos que habían tenido a Bakelants en el dique seco. Un desenlace de etapa soñado para él y para su equipo, que ya tiene parte de los deberes hechos para todo el Tour. A ver hasta dónde puede llegar Andy Schleck,  a quien, por cierto, hemos visto delante en el grupo en las subidas. Buena señal. 

Clasificación de la etapa
1. BAKELANTS Jan RADIOSHACK LEOPARD 03h 43' 11''
2. SAGAN Peter CANNONDALE + 00' 01''
3. KWIATKOWSKI Michal OMEGA PHARMA-QUICK STEP + 00' 01''
4. CIMOLAI Davide LAMPRE - MERIDA + 00' 01''
5. BOASSON HAGEN Edvald SKY PROCYCLING + 00' 01''
6. SIMON Julien SOJASUN + 00' 01''
7. GAVAZZI Francesco ASTANA PRO TEAM + 00' 01''
8. IMPEY Daryl ORICA GREENEDGE + 00' 01''
9. BENNATI Daniele TEAM SAXO-TINKOFF + 00' 01''
10. LAGUTIN Sergey VACANSOLEIL-DCM + 00' 01''

Clasificación general
1. BAKELANTS Jan RADIOSHACK LEOPARD
2. MILLAR David GARMIN - SHARP + 00' 01''
3. SIMON Julien SOJASUN + 00' 01''
4. IMPEY Daryl ORICA GREENEDGE + 00' 01''
5. BOASSON HAGEN Edvald SKY PROCYCLING + 00' 01''
6. GERRANS Simon ORICA GREENEDGE + 00' 01''
7. KWIATKOWSKI Michal OMEGA PHARMA-QUICK STEP + 00' 01''
8. LAGUTIN Sergey VACANSOLEIL-DCM + 00' 01''
9. RIBLON Christophe AG2R LA MONDIALE + 00' 01''
10. EVANS Cadel BMC RACING TEAM + 00' 01''


Ajaccio, que ayer vibró con el final de etapa, será hoy punto de partida del tercer viaje del Tour de Francia, último en la isla de Córcega. La etapa se las trae. Promete, de nuevo, emociones fuertes con un recorrido aún más atractivo y jugoso que el de ayer, puesto que hay un puerto de segunda categoría (el Col de Marsolino) a tan sólo 12,5 kilómetros de meta. No será día para esprinters. 

Comentarios