"Tengo a la gente un poco mal acostumbrada, pero yo estoy contento con esta segunda plaza. Primero, segundo y cuarto en las tres clásicas no creo que esté al alcance de muchos". Con estas palabras resumía Valverde sus sensaciones tras quedarse a las puertas de su tercera Lieja-Bastoña-Lieja, que ganó el australiano Simon Gerrans. Coincido en su planteamiento. A Valverde se le exige la victoria, pero resulta que el resto de corredores también corre. Y Gerrans no es un ciclista cualquiera. Se le reprocha al murciano que no se moviera en las cotas más próximas a meta para evitar una llegada al sprint en la que podía perder en un mano a mano con Gerrans o incluso con Michal Kwiatkowski (tercero). No se movió él, es verdad, ni tampoco el resto de favoritos en una edición centenaria de la carrera que no será recordada por su espectacularidad.
Decepcionó bastante la ausencia casi total de ataques entre los hombres fuertes de la carrera (o ni siquiera entre ellos, entre casi nadie) durante la prueba. La fuga del día fue protagonista exclusiva de la clásica durante muchos kilómetros, demasiados, y por detrás fueron contados los movimientos. Muy valiente y activo Arredondo, del conjunto Trek, que se movió en la Redoute y fue protagonista en la parte final. También lo intentaron Pozzovivo y Caruso. Algún ataque lanzó también, cómo no, Vincenzo Nibali. Demarrajes vimos de Samuel Sánchez y Lars Petter Nordhaug. Y poco más.
Lo cierto es que esperábamos más batalla entre los gallos de la carrera. En la parte final, Caruso (asumiendo la responsabilidad en Katusha tras el abandono de Joaquim Rodríguez) y Pozzovivo se marcharon por delante. Tomaron una ventaja de unos 15" frente al grupo de favoritos, en el que se contemporizada sabiendo que la ascensión final por las calles de Ans, picando hacia arriba, sería una prueba muy dura para los escapados. En efecto, se logró darles caza. Primero con un demarraje que Valverde, que llevaba muy buenas piernas. El murciano, junto a Gerrans y Kwiatkowski, se disputaron la prueba al sprint. Se impuso con autoridad el corredor australiano, ganador de la Milán-San Remo en 2012, por lo que suma aquí su segundo monumento.
No pudo ser la victoria para Valverde en este final de la primavera ciclista de clásicas. Como él mismo dice, el balance es positivo. Decidió, al igual que el resto de favoritos, esperar al final y resolver la clásica al sprint, confiando en su punta de velocidad. Tampoco anduvo tan desencaminado, ya que terminó segundo sólo por detrás de Gerrans. Se quedó a las puertas, pero el balance de esta primera parte de la temporada, en la que es el ciclista con más victorias, es muy positivo. Tras el final de las clásicas, cambia el escenario del calendario ciclista. Ahora, carreras por etapas y el Giro de Italia en el horizonte.
Clasificación
1 Simon GERRANS ORICA GREENEDGE 6:37:43
2 Alejandro VALVERDE MOVISTAR TEAM 0:00:00
3 Michal KWIATKOWSKI OMEGA PHARMA-QUICK STEP 0:00:00
4 Gianpaolo CARUSO TEAM KATUSHA 0:00:00
5 Domenico POZZOVIVO AG2R LA MONDIALE 0:00:03
6 Tom Jelte SLAGTER GARMIN - SHARP 0:00:03
7 Roman KREUZIGER TINKOFF-SAXO 0:00:03
8 Philippe GILBERT BMC RACING TEAM 0:00:03
9 Daniel MORENO FERNANDEZ TEAM KATUSHA 0:00:05
10 Romain BARDET AG2R LA MONDIALE 0:00:06
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