Un tiburón sobre piedras

El Tour de Francia amanece hoy como un campo de batalla después del combate. Corredores magullados, extenuación, ciclistas que causaron baja tras la jornada precedente, vencedores fatigados que observan la ventaja alcanza sobre valerosos derrotados. Fue una memorable etapa de ciclismo. El Tour de Francia, sus corredores, construyeron ayer un colosal monumento a este deporte. La esencia del ciclismo, resumida y comprimida de forma prodigiosa en un día sobre las piedras y bajo las lluvias. La ronda gala transitó por tramos de adoquín, alguno de los cuales compone el recorrido habitual de la París-Roubaix, por algo llamada el Infierno del norte. Decir que la etapa de ayer es de la que hacen afición es quedarse corto. La entrega hasta el límite de los gladiadores de la bicicleta, de estos titanes que asombran al mundo con su esfuerzo y su valor, nos dejó ayer escenas imborrables del mejor ciclismo. 

"Esto es el ciclismo", dijo ayer Vincenzo Nibali al concluir la etapa. Imposible resumir de forma más concisa y acertada lo visto ayer en el Tour de Francia. Puro ciclismo. Nada más y nada menos. Los corredores terminaron ayer agotados, naturalmente, pero conscientes de que habían sido protagonistas de una jornada que pasa ya a la historia de este deporte por la puerta grande y con letras mayúsculas. Un día de leyenda en el que se trataba de jugar a ciclista. De echarle arrestos. De demostrar que este deporte es un deporte de equipo. Ahí quedó la impresionante exhibición de Astana arropando a su fiero líder, un Vincenzo Nibali que se afianza en el primer puesto de la general. Todo lo que hace del ciclismo un deporte único, inigualable, inmortal, inclasificable, se vio ayer en la espléndida etapa de adoquín. 

Se trataba de salir con vida de esta etapa y no todos lo lograron. El único pero de la jornada, aquello a lo que se arriesgaba el Tour al incluir esta etapa en el recorrido, fue la caída de Chris Froome, ganador de la pasada edición. Perder a favoritos en el rosario que fue la etapa de ayer era el mayor riesgo la peor noticia de ayer fue la marcha a su casa del líder de Sky. La mala suerte se ha cebado con el corredor británico de origen keniata. En el Critérium du Dauphiné, prueba preparatoria para el Tour, Froome comenzó arrrasando con dos triunfos de etapa. Cuando vestía de líder sufrió una caída que mermó sus condiciones físicas en la parte final de aquella prueba. En el Tour no le ha ido mejor. Antes de ayer se fue al suelo y se dañó la muñeca. Con esa lesión, ayer le resultó imposible mantenerse en pie con los botes inhumanos, estrepitosos que provoca el adoquín. Dos caídas y despedida del Tour. Una mala noticia para la carrera y para este deporte. Como digo, casi la única del día de ayer. 

Fue un día dantesco, con muchas caídas. Pero, puesto en la balanza, la imagen de entrega de los corredores, el pelotón roto en mil pedazos, la asombrosa y deliciosa impresión de estar viviendo una clásica de primavera en pleno Tour, y con el añadido de dificultad de la lluvia, pesan más que los aspectos adversos del día de ayer. ¿Alguien duda de que será una etapa recordada por años? Me cuesta recordar un inicio de Tour tan intenso y trepidante como este. Con la impresionante respuesta del público en el Reino Unido, la espléndida segunda etapa, que nos regaló una mini clásica de muros, con la exhibición en los sprints del mejor velocista del mundo (por cierto, también se fue al suelo ayer Marcel Kittel) y, para remate, con esta visita al pavés de la París-Roubaix. Pletórica comienzo de Tour. 

Generó muchas noticias la etapa de ayer. Comentada la cruz, la retirada de Froome, toca hablar de la cara. Sin duda, representada por Nibali y Boom. El segundo consiguió una inmensa victoria de etapa que, ojalá, sirva para que el conjunto Belkin encuentre un patrocinador a final de temporada. Ganó en solitario tras dejar atrás a Nibali y Fuglsang, otros dos de los grandes protagonistas del día. El Tiburón se manchó de barro el maillot amarillo de líder. Pocas escenas con tanto valor simbólico, con tanta capacidad de resumir el coraje y el espíritu batallador y valiente. Es un corredor de otra época, uno de esos ciclistas necesarios e insustituibles en el pelotón. Un ganador de Giro y Vuelta que este año, lo dijo desde el inicio pero será ahora cuando muchos empezarán a creerlo más, viene al Tour a por la victoria final.

De la mano de su equipo, especialmente brillantes Kajob Fuglsang y Lieuwe Westra, al lado de su líder prácticamente hasta el final, Nibali dio un auténtico recital. Una lección de cómo ser valiente y buscar sacar partido de un día de perros como el de ayer. "Es ciclismo", resumió, brillante, genial, Nibali en meta. Ciclismo del bueno. El ciclista italiano se asienta en el liderato  con 2:11 sobre Valverde y 2:37 sobre Contador. Fue un día muy duro para ambos corredores españoles. El líder de Movistar tuvo que hacer la parte final de la etapa con la bici de su compañero Juan José Rojas, otra demostración de lo valioso que es tener un equipo al lado que te arrope. Contador, por su parte, explicó en meta que no pudo cambiar de piñones porque se le metió barro. Era un día en el que lo importante era salir con vida y el líder del Tinkoff-Saxo lo logró, pero dio síntomas de agotamiento en la parte final, cuando sus corredores tuvieron que aflojar el ritmo para llevarle hasta meta. Se le vio muy fatigado. No creo, sin embargo, que haya que sacar conclusiones precipitadas de ello. Es más, a pesar de los 2:37, creo que sigue siendo un muy serio candidato al triunfo final, tal vez el mayor. Eso sí, ahora se verá obligado a atacar a un sólido Nibali. 

Merecen mención aparte Peter Sagan, cuarto en la etapa y tercero en la general, quien no logró rematar el día con una victoria, pero estuvo siempre en cabeza. Y, por supuesto, también es digno de elogio el gran rendimiento de Michal Kwiatkowski, la perla polaca del conjunto Omega Pharma Quick Step, el caníbal del siglo XXI, que ya se pone cuarto en la general. Su gran prueba de fuego será la alta montaña, pero nadie haría bien en despreciar su capacidad. El techo de Kwiatkowski es totalmente desconocido. Decepcionó algo ayer no ver un ataque de Fabian Cancellara, amo y señor de las piedras, que ayer estuvo en cabeza pero no se movió y terminó quinto. 

Hoy, sexta etapa. 194 kilómetros de recorrido entre Arras y Reims llamado a resolverse al sprint. Día en el que los afectados con caídas en el día de ayer, o sea, medio pelotón, intentará ir reponiéndose porque, a diferencia de las clásicas de un día, esto no para. 

Clasificación de la etapa 5
1 Lars BOOM NED BEL 3:18:35
2 Jakob FUGLSANG DEN AST 19
3 Vincenzo NIBALI ITA AST 19
4 Peter SAGAN SVK CAN +1:01
5 Fabian CANCELLARA SUI TFR +1:01
6 Jens KEUKELEIRE BEL OGE +1:01
7 Michal KWIATKOWSKI POL OPQ +1:07
8 Lieuwe WESTRA NED AST +1:09
9 Matteo TRENTIN ITA OPQ +1:21
10 Cyril LEMOINE FRA COF +1:45
11 Alexander PORSEV RUS KAT +2:02
12 Mathew HAYMAN AUS OGE +2:02
13 Sep VANMARCKE BEL BEL +2:02
14 Jan BAKELANTS BEL OPQ +2:02
15 Mark RENSHAW AUS OPQ +2:02
16 Jurgen VAN DEN BROECK BEL LTB +2:02
17 Tony MARTIN GER OPQ +2:02
18 Tony GALLOPIN FRA LTB +2:02
19 Jurgen ROELANDTS BEL LTB +2:08
20 Richie PORTE AUS SKY +2:11

Clasificación general
1 Vincenzo NIBALI Italy AST 20:26:46
2 Jakob FUGLSANG Denmark AST 2
3 Peter SAGAN Slovakia CAN 44
4 Michal KWIATKOWSKI Poland OPQ 50
5 Fabian CANCELLARA Switzerland TFR +1:17
6 Jurgen VAN DEN BROECK Belgium LTB +1:45
7 Tony GALLOPIN France LTB +1:45
8 Richie PORTE Australia SKY +1:54
9 Andrew TALANSKY United States GRS +2:05
10 Alejandro VALVERDE BELMONTE Spain MOV +2:11
11 Romain BARDET France ALM +2:11
12 Tejay VAN GARDEREN United States BMC +2:11
13 Rui Alberto FARIA DA COSTA Portugal LAM +2:11
14 Geraint THOMAS Great Britain SKY +2:16
15 Thibaut PINOT France FDJ +2:25
16 Tom DUMOULIN Netherlands GIA +2:25
17 Yury TROFIMOV Russia KAT +2:25
18 Bauke MOLLEMA Netherlands BEL +2:27
19 Alberto CONTADOR VELASCO Spain TCS +2:37
20 Jan BAKELANTS Belgium OPQ +2:39

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