El reto de Oleg Tinkoff no cuaja

Hace un mes, Oleg Tinkoff, el excéntrico y millonario propietario del equipo de Contador, propuso a los cuatro grandes corredores de vueltas por etapas (el propio Contador, Vincenzo Nibali, Nairo Quintana y Chris Froome) un reto: correr las tres grandes vueltas a cambio de un millón de euros a repartirse entre los cuatro. Por lo general, la propuesta se recibió con tanto escepticismo como con elogios al millonario ruso por animarse a intentar aportar novedades al mundo del ciclismo, algo que viene bien siempre. Se le debe reconocer a Tinkoff, fanfarronadas aparte, el interés que muestra por este deporte y su voluntad por mejorarlo. Todas las propuestas de quienes están implicados en el ciclismo y quieren mejorarlo como deporte deben ser bienvenidas. 

Por tanto, a Tinkoff hemos de agradecerle que pusiera encima de la mesa esa propuesta. Parecía evidente que la motivación económica no iba a hacer cambiar de planes de los cuatro fantásticos, como así ha sido, pero no deja de ser una atrevida propuesta del propietario del conjunto donde milita Contador. Ha dado juego y ha generado debate, que no es poco. Pero hasta ahí ha llegado, de momento, pues no parece que ninguno de los cuatro grandes ciclistas vayan a correr Giro, Tour y Vuelta el próximo año

El primero que rechazó la propuesta fue Vincenzo Nibali, ganador del Tour este año y del Giro la edición pasada, quien en principio tiene previsto correr en 2015 estas dos carreras, la grande boucle y la de casa. Alberto Contador, que es de los cuatro el que más veces ha hablado del sueño y el inmenso reto que sería para él correr las tres grandes, tampoco lo ve claro y ya ha dicho que esta temporada correrá Giro y Tour. No será la mejor preparación para la ronda gala llegar de la corsa rosa, donde naturalmente irá a por la general, es decir, con la entrega máxima que exige la lucha por el triunfo en una gran vuelta, mientras que otros corredores llegarán más frescos al Tour y con la ronda gala como objetivo central de la temporada. No hay más que mirar a la historia reciente para comprobar que ganar el Tour después del Giro es algo excepcional que en muy contadas ocasiones se ha logrado. El último en conseguirlo fue el mítico Marco Pantani, que ganó ambas carreras en 1998. 

Es interesante repasar la historia porque nadie ha ganado el mismo año las tres grandes. Y, tan sólo ocho ciclistas han conseguido ganar dos grandes vueltas en el mismo año. Nombres todos, claro, muy selectos. El primer en lograrlo fue Fausto Coppi, quien en 1949 y en 1952 ganó el Giro y el Tour. Después le sucedió el legendario ciclista francés Jacques Anquetil, ganador de Tour y Vuelta en 1963 y de Tour y Giro un año después. En esta lista, naturalmente, está el Caníbal Eddy Merckx, como en todas las que hablan de grandes hazañas en este deporte, En 1970 y 1972, el corredor belga ganó Giro y Tour, mientras que en 1973 ganó el Giro y la Vuelta, aquel año que no corrió el Tour y el español Luis Ocaña venció en la ronda gala. Bernard Hinault es el siguiente corredor que consiguió la heroicidad de ganar dos grandes vueltas en un mismo año. Ganó Tour y Vuelta en 1978 y combinó Tour y Giro dos veces, en 1982 y en 1985. Entre medias, el italiano Giovanni Battaglin se impuso en el Giro y en el Tour en 1981. 

En los 90 sólo dos corredores consiguieron la hazaña. El mencionado Pirata Pantani y el gran Miguel Indurain, que ganó Giro y Tour dos años seguidos, en 1992 y en 1993. Después llegó Pantani en 1998 y, como ya recordarán hasta los más jóvenes, Alberto Contador en 2008 cuando se impuso en el Giro y en la Vuelta. Por tanto, el reto de afrontar las grandes queda en el aire, donde queda también la duda sobre su viabilidad cuando nadie en la historia lo ha conseguido, pero el de buscar dos grandes ya es lo suficientemente serio. Lo afrontarán Contado y Nibali en Giro y Tour y, previsiblemente, Quintana y Froome en el Tour y la Vuelta. Veremos. 

Por cierto, la imagen de arriba corresponde a la ascensión (pero no en bici) que Contador y todo el equipo Tinkoff-Saxo culminó ayer al Kilimanjaro, la cima más alta de África. La montaña está situada en Tanzania a 5.895 metros. Bjiarne Riis, director deportivo del equipo, tiene costumbre siempre de hacer una concentración de pretemporada original y en este caso ha optado por el senderismo. Tras cinco días de ascensión, los corredores del equipo coronaron ayer el techo del continente africano. Llovió, hicieron frente al frío, pero las 80 personas que componen la expedición la culminaron con éxito. Curiosa forma de prepararse para la próxima temporada. 

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