Hace unos días nos preguntábamos aquí si podíamos hablar de brotes verdes en el ciclismo español por las solicitudes de licencias para formar equipos continentales la próxima temporada. Hoy tenemos una buena noticia en otro frente, el de la organización de carreras, que también nos invita al optimismo. Cuando se viene de una situación tan penosa como la atravesada por el ciclismo español estos últimos años, con la crisis económica y el lastre de imagen que han supuesto los casos de dopaje como rémoras casi insalvables, es pronto para lanzar las campanas al vuelo. Pero últimamente, en este invierno ciclista, van llegando informaciones que nos permiten sonreír y pensar que, tal vez, lo peor ha pasado. Ojalá así sea.
Hablo del regreso de la Vuelta Ciclista Internacional a Madrid, que según recoge la Unión Ciclista Internacional (UCI) en su página web se disputará el próximo año los días 9 y 10 de mayo. Supondrá el retorno de esta competición que dejó de disputarse el año pasado por falta de apoyos financieros. La última vez que se celebró la carrera fue en 2013, cuando ganó Javi Moreno. Al parecer, está confirmado que la prueba tenga dos días (en 2013 se celebró en formato clásica precisamente por las apreturas presupuestarias) e incluso, según informan los compañeros de Biciciclismo, podría llegar a los tres días de competición si la Federación Madrileña de Ciclismo, a la que debemos agradecer el empeño por hacer que la desaparición de la Vuelta a Madrid fuera sólo un lapsus temporal y no algo permanente, logra encontrar respaldo por parte del Ayuntamiento de Madrid. Ya cuenta con apoyo de la Comunidad.
Es una sensacional noticia que la Vuelta a Madrid regrese. Lo anómalo era en realidad que una región como esta no contara con ninguna carrera ciclista profesional. La historia de esta prueba, pienso que este es un buen momento para repasarla, se remonta al año 1983. Desde entonces y hasta 2004 la Vuelta a Madrid era para corredores amateurs. A partir de 2006 da el salto a profesionales, y durante algunos años se simultanea la prueba sub 23 (que dejó de disputarse entre 2005 y 2007 y tampoco en 2011) con la profesional, donde los ganadores son Sergi Escobar, Manuel Lloret, Oleg Chuzhda, Héctor Guerra, Sergio Pardilla, Rui Costa, Sergei Firsanov y Javi Moreno. En 2008 ascendió a la categoría 2.1, lo que permitió que participaran los equipos World Tour.
De momento, nada se ha dicho del regreso de la prueba sub23, que se disputó por última vez en 2011. La carrera profesional llegó a contar con cinco etapas en su momento de mayor esplendor. En 2015 regresaría con dos o con tres en el mejor de los casos, pero desde luego algo es algo. Es de esperar que la acogida del público sea más calurosa y numerosa de lo que fue en otras ocasiones, porque es cierto que a veces la Vuelta a Madrid ha dado una imagen más bien desangelada respecto a la presencia de aficionados. Ojalá podamos seguir contando buenas noticias que confirmen esos brotes verdes que queremos ver asomarse en nuestro deporte.
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