Previa del Giro de Italia. Recorrido (II)

La segunda semana del Giro de Italia presenta como principal cita una contrarreloj individual bastante más larga que en los últimos años. Quizá este segundo tramo de carrera sea lo más flojo, o lo único flojo en realidad, de esta edición de la corsa rosa. Algo le falta. Estas son las etapas: 

Etapa 10. Martes, 19 de mayo. Civitanova Marche-Forli. 195 kilómetros. 
Con una etapa llana, extremadamente llana, comienza esta segunda semana del Giro de Italia. En principio, por tanto, no existe el riesgo de que a los corredores se les atragante la vuelta a la carrera tras el primer día de descanso. Jornada propicia para el sprint de 195 kilómetros. 

Etapa 11. Miércoles, 20 de mayo. Forli-Imola. 147 kilómetros
Bastante más juego que la etapa precedente debería dar esta jornada undécima que, además, acabará en el circuito de Imola, donde se encuentra la sede de la escudería Ferrari, otro de los símbolos del deporte italiano junto al Giro. Antes de llegar a ese escenario mítico del automovilismo, la etapa presenta continuas ascensiones que, aunque en la mayor parte de los casos no está catalogada como puertos, sí gastarán mucho a los ciclistas y darán oportunidad a los escapados. En la parte final se pasará tres veces un circuito que sube a Tre Monti, de cuarta categoría. Día atractivo. 

Etapa 12. Jueves, 21 de mayo. Imola-Vicenza (Monte Berico). 190 kilómetros. 
Un final en alto en el puerto de cuarta categoría de Monte Berico es el principal aliciente de esta duodécima etapa que parte de Imola y que durante la mayor parte del recorrido será llana, aunque al final los corredores se hallarán con la citada subida final más otro puerto de cuarta categoría (Castelnuovo) y uno de tercera (Crosara). Recorrido no les faltará a los ciclistas para intentar sorprender al gran grupo. 

Etapa 13. Viernes, 22 de mayo. Montecchio Maggiore-Jesolo. 153 kilómetros. 
La llanura absoluta de esta etapa 13 es la antesala a un muy trascendente tercer fin de semana de carrera. En principio, esta jornada, de 153 kilómetros, es ideal para ver una llegada masiva o, quizá ya con los equipos de los sprinters más cansados por el paso del tiempo, para que cuaje alguna escapada. Los favoritos, a intentar reservar todo lo posible de cara a la crono del sábado y al etapón del domingo. 

Etapa 14. Sábado, 23 de mayo. Treviso-Valdobbinadene. 59,4 kilómetros. 
El Tour de Francia de este año se caracteriza por la presencia testimonial de la contrarreloj. Nada que ver con el Giro que, aunque claramente se decidirá en la brutal última semana montañosa, sí le da este año más importancia a la lucha contra el crono. Jornada esta del sábado 23 de mayo, etapa 14, muy relevante para la marcha del Giro de Italia. Sin duda, la más decisiva de cuantas se habrán disputado hasta el momento. Son 59,4 kilómetros de recorrido. Hay espacio para hacer muchas diferencias. No es una crono lisa. Tiene distintas partes. En la primera, desde el inicio hasta el kilómetro 30, aproximadamente, sí es llana. Pero después se asciende San Pietro di Feletto, puerto de cuarta categoría, y más tarde, tras un descenso y un tramo llano, la carretera vuelve a empinarse a partir del kilómetro 49,5 y así hasta el 55,3, cuando el terreno pica hacia abajo. Crono exigente y muy importante para esta corsa rosa. 

Etapa 15. Domingo, 24 de mayo. Marostica-Madonna di Campiglio. 165 kilómetros. 
No tardarán nada los escaladores aspirantes a la general que hayan perdido más tiempo de la cuenta en la crono en contar con terreno propicio para recortar distancias. La etapa 15 presenta un perfil muy exigente, preludio de la descomunal última semana de carrera. La jornada acaba en  Madonna di Campiglio, con sus 15,5 kilómetros al 5,9%  y rampas que alcanzan el 12%. Antes de eso subirán La Fricca, de segunda categoría, en el kilómetro 60 de carrera, y el Passo Daone, a 3 kilómetros del final, catalogado de primera categoría. 

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