Calmejane deslumbra y Sky domina




El mejor momento en una sala de cine es cuando se apagan las luces y está a punto de empezar la película. Entonces, todo es posible. Hay grandes expectativas, puede ocurrir cualquier cosa. Te enfrentas a la película sin saber si dos horas después saldrás del cine deslumbrado o decepcionado. Pero en ese instante, cuando se apagan las luces, siempre esperas lo mejor. Con las etapas de montaña del Tour de Francia pasa un poco lo mismo. Al principio todo es posible, pero sólo con el paso del tiempo se sabe si se vivirá un gran espectáculo o no. Y el día de hoy ha sido más decepcionante que ilusionante. Los favoritos pensaban más en el día de mañana, por lo que no se han visto movimientos. Pero se ha rodado muy rápido, con ataques constantes de segundos espadas. Un día exigente, una jornada poco vistosa en la lucha por la general, pero agotadora pera todos. 

El gran protagonista del día ha sido Lilian Calmejane, el joven corredor grandes del Direct Energie que ya sabe lo que es ganar una etapa en la Vuelta y que hoy ha logrado, con 24 años, su primer triunfo en el Tour. Ojo a este escalador de enorme talento, que este año ha ganado la Estrella de Bessèges más una etapa, la Semana de Coppi y Bartali con un triunfo parcial y el Circuito de la Sarthe, donde también sumó a su victoria en la general una etapa. Es decir, estaba haciendo una temporada excepcional, pero el Tour es el Tour. Y la etapa de hoy, además, tiene unmérito  extraordinario, porque toda la batalla que no han tenido los favoritos se ha vivido entre los escapados. 

Más de 40 corredores han llegado a entrar en el corte. Constantes ataques, con todos los equipos queriendo meter a alguien por delante, por si la fuga triunfaba y para evitarse trabajar por detrás. Entraron ciclistas de mucho nivel, como Mikel Landa, del Sky. Todos los grandes equipos parecían más o menos conformes. Pero el equipo británico está acostumbrado a correr de una forma clara, dominando con poderío insultante. Y así es como ha corrido hoy. Controlando la fuga en todo momento, decidiendo a qué ritmo marchaba el pelotón en cada momento, exhibiendo una fortaleza descomunal. Cualquier atisbo de menor dominio del Sky respecto a años anteriores ha sido un espejismo. El equipo de Chris Froome, que conserva el liderazgo, sigue siendo esa escuadra sólida que infunde temor entre sus rivales. Eso no quiere decir que no haya opciones para los corredores aspirantes a la general ni que el Sky no pueda tener un mal día. Pero lo visto hasta ahora indica que la vida sigue igual, que el equipo británico es el más fuerte del Tour. 

Todo el trabajo de Sky de hoy no ha sido para anticipar un ataque de Froome. Sencillamente, el equipo británico quería imponer su ritmo, porque para algo puede ofrecer estos recitales sin que le pase factura. Uno tras otro, gregarios que en otro equipo serían casi líderes tiraban de Froome, marchando como quería el gran líder. Y nadie osó amenazar al Sky, puede que porque el puerto de hoy no era especialmente duro y porque la meta estaba situada a unos ocho kilómetros de la cima del puerto, lo que ha disuadido a los aspirantes. 

Robert Gesink fue segundo. El corredor holandés del LottoNL- Jumbo no ha tenido opción en ningún momento frente a Calmejane, ni siquiera cuando el ciclista francés ha sufrido unos calambres que amenazaban con dar al traste con su excepcional esfuerzo. Y poco más ha dejado la etapa, aparte del agotamiento de los favoritos, que hoy no han atacado, pero sí han sufrido por un ritmo tan exigente. 


La etapa de mañana, esta sí, debería servir para ver un duelo entre los favoritos. Un puerto de cuarta categoría, dos de tercera, uno de segunda y dos de categoría especial son suficientes dificultades orográficas para que haya batalla. El último puerto del día será el Mont du Chart, inédito en el Tour de Francia, pero que ya se subió en el Dauphiné este año. Un puerto muy exigente cuya cima está a unos 25 kilómetros de meta. 

Froome buscará probablemente dejar claro, otra vez, que es el más fuerte, mientras que Fabio Aru, Romain Bardem y Richie Porte están llamados a ser los dos mayores rivales del británico nacido en Kenia. Más dudas generan Nairo Quintana y Alberto Contador. Este último se ha mostrado en cabeza del grupo en algún momento de la ascensión final y ha declarado en meta que se ha sentido fuerte. Veremos qué sucede. La etapa de mañana es perfecta para que algún valiente ataque de lejos. Y no sería la primera vez que Contador es el gran protagonista del día intentando sorprender a muchos kilómetros de meta. Por cierto, el corredor del Trek está siguiendo la serie Narcos y The Big Bang Theory en Netflix, según ha dicho hoy en meta. Ojalá el capítulo de mañana en el Tour, que tanto se parece a una serie, sea más atractivo que el de hoy, en el que al menos podemos celebrar todos los amantes del ciclismo la graduación de un ciclista joven con todo el futuro por delante, Lilian Calmejane.  

Comentarios