Sagan se expulsa del Tour



Elogiábamos ayer como se merecía a Peter Sagan por si estratosférica victoria en la tercera etapa del Tour de Francia. Hoy toca criticarlo y reconocer que su descalificación de la carrera es justa, después de su peligrosa e inaceptable maniobra en el sprint final, en la que empujó contra las vallas de un codazo a Mark Cavendish, quien se tuvo que retirar de la ronda gala con un hombro fracturado. Esto no va de apoyar a Sagan ni de admirarlo más o menos. Hace mucho que perdimos la cuenta de los elogios al ciclista eslovaco en este blog. Pero si se equivoca, por muy Sagan que sea, se tiene que reconocer. Y, despojados de pasiones, el comportamiento de ayer del campeón del mundo es indigno, porque puso en riesgo a un compañero. No podemos defender constantemente que lo primero es garantizar la seguridad de los ciclistas y que después sean ellos mismos los que sean un peligro para sus compañeros sin que pase nada. 

No tuvo que ser fácil para los jueces tomar la decisión, pero acertaron. No les quedaba otra. Cualquier cosa que no fuera la descalificación de Sagan habría sido sentar un peligroso precedente, porque sería tanto como decir que los patricios del pelotón tienen manga ancha para actuar como les venga en gana. El Tour pierde a una de sus grandes estrellas, sí, pero exactamente igual que la Vuelta perdió a Nibali, descalificado tras ayudarse del coche de su equipo para alcanzar al pelotón tras descolgarse por una caída. Las normas están para cumplirse y se deben aplicar igual para todos, porque si no pierden el sentido. No tendría razón de ser que se fuera flexible con los nombres destacados del pelotón, eso de ser fuerte con los débiles y débil con los fuertes. 

En la recta de meta, antes del episodio de Sagan y Cavendish, se provocó otra caída, en la que se fue al suelo, entre otros, el líder, Geraint Thomas. Los nervios, la tensión por llegar delante, tanto de los equipos de los velocistas como de los de los favoritos para la general, son siempre un peligro en estas etapas. Cuando no nos habíamos sobrepuesto de aquel susto, llegó la maniobra de Sagan. El eslovaco se había quedado cerrado y cambió de trayectoria de forma brusca, algo que ya de por sí es irregular. Venía Cavendish por las vallas, sin espacio. Intentó el corredor británico del Dimension Data meterse por donde no entraba, es verdad. Pero eso no justifica bajo ningún concepto que Sagan saque el hombro en medio de un sprint, a velocidades enormes, con él inmenso peligro que eso supone. 

Arrastra Cavendish una fama de velocista poco limpio, y es cierto que ayer intentó avanzar cuando no tenía hueco, poniendo en riesgo su integridad física y la de los demás. Pero eso no significa que Sagan esté libre de culpa. Al revés, fue él quien sacó el codo y quien echó contra las vallas al corredor de la Isla de Man. Los jueces anunciaron primero una sanción de 30 segundos en la etapa y 50 puntos en la clasificación de la regularidad, pero poco después se reunieron de emergencia para acordar la descalificación del corredor del Bora. No podían tomar otra decisión sin perder credibilidad. 

Antes del sprint, en el que también se fue al suelo John Degenkolb (Trek) y en en que venció Arnaud Démare (FDJ), aunque del pobre casi nadie habla por lo sucedido con Sagan, el protagonista del día fue Guillaume van Keirsbulck (Wanty-Groupe Gobert), que se mantuvo escapado durante la mayor parte de la etapa, en solitario, llevándose todos los planos de televisión para su equipo, invitado, que está ejerciendo el rol de animador de carrera que se espera de él. 

Aún con la polémica sobre la expulsión de Sagan (aunque, ya decimos, no creemos que haya lugar para la polémica), hoy llega el primer final en algo serio del Tour, con la llegada a La Planche des Belles Filles, en los Vosgos, donde los favoritos se verán las caras. 

Comentarios

Unknown ha dicho que…
No comparto tu visión. Si Sagan no saca el codo, Cavendish tira a Sagan y se caen los dos, más algún otro. Es instinto de supervivencia, un acto involuntario y reflejo. Mucho más consciente y sancionable es la cruzada de Demare.
Alberto Roa ha dicho que…
Buenas, Félix. Muchas gracias por leer y comentar. Tienes razón en que Cavendish se intentó meter por donde no podía. Pero sacar el codo en mirad del sprint... En todo caso, reconozco que escuchando visiones diferentes veo que hay muchos matices en el incidente. En todo caso, seguro que coincidimos en que es una pena. Un saludo!
Unknown ha dicho que…
Más gracias a ti por es escribir.

Creo que el codo de Sagan sale tanto porque el impacto de Cavendish desde atrás lo desplaza.

Coincidimos. Es una pena perder a Sagan.

Abrazo!