Generalmente las grandes vueltas tienen a un dominador incontestable en los sprints, a un rey de las volatas. Este año, el Tour aún no ha definido a su jerarca de la velocidad. Comenzó muy fuerte Fernando Gaviria, el colombiano del Quick-Step Floors, con dos triunfos parciales, pero pronto le discutió el trono Peter Sagan, que tiene por costumbre veraniega cambiar su maillot arcoíris de campeón del mundo por el verde de líder de la regularidad de la Grande Boucle. El corredor eslovaco del Bora sumó pronto otras dos etapas y todo hacía indicar que las llegadas masivas serían un duelo entre Gaviria y él. Pero a ambos les ha salido un rival temible con una estratosférica punta de velocidad, Dylan Groenewegen, vencedor de la etapa de ayer y de nuevo ganador hoy en Amiens, en la etapa previa a la muy esperada jornada de adoquines camino de Roubaix de mañana, que concluirá antes de lo habitual para no coincidir con la final del Mundial de fútbol.
El corredor neerlandés del Lotto NL-Jumbo llevaba nueve victorias esta temporada: una etapa del Tour de Dubái, dos de la Vuelta al Algarve, la Kuurne-Bruselas-Kuurne, una etapa de la París- Niza, tres del Tour de Noruega y otra del Tour de Eslovenia. A estas ha añadido en dos días dos etapas en el Tour de Francia, ambas con un dominio arrollador sobre los grandes velocistas del mundo (André Greipel, Peter Sagan, Fernando Gaviria...). Todos menos Marcel Kittel, que no está ni se le espera, y cuyo bajo estado de forma preocupa en el Katusha, que ya ha empezado a criticar de forma pública a su hombre rápido. El velocista alemán, dominador otros años en los sprints del Tour, no ha encontrado de momento su golpe de pedal, algo preocupante en un velocista, ya que la mayoría de las oportunidades para esto corredores estaban reservadas en esta primera semana de Tour. En el sprint fueron descalificados Gaviria y Greipel por un enganchón entre ellos, con cabezazo incluido.
Antes del apasionante final al sprint, en el que Groenewegen ha ganado con enorme autoridad, formaron la escapada del día Fabian Grellier (Direct Energie), Marco Minnaard (Wanty) y Laurens Ten Dam (Sunweb). Este último fue el primer en ser cazado por el pelotón, mientras que Grellier fue el que llevó hasta más lejos su cabalgada.
El camino hacia la preciosa localidad de Amiens, donde terminaba la etapa, no fue nada tranquilo, con momentos de tensión, como el generado por una caída en la parte final de la jornada en la que se vieron afectados varios corredores. Entre ellos, Dan Martin, quien perdió 1:15 en meta con el pelotón. También se vio envuelto en esta caída Julian Alaphilippe. En un movimiento algo sorprendente, Philippe Gilbert, compañero de equipo de Alaphilippe y de Gaviria, intentó sorprender al pelotón y evitar el sprint. No lo logró, pero su ataque valiente tenía mucho valor, por lo complicado de la empresa y porque Gilbert está a solo 16 segundos del líder, Greg Van Avermaet. Finalmente fue cazado.
Y mañana, día grande, con la temida y ansiada etapa de los tramos de adoquín rumbo a Roubaix. Un día decisivo en este Tour de Francia que ya ha dejado atrás la sucesión de etapas llanas destinadas al sprint y que tendrá su primer contacto serio con la montaña la próxima semana.
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