El Tour de Romandía que comenzó el martes está siendo por encima de todo, la carrera del regreso de Juan Ayuso. Llevaba sin competir desde la pasada edición de la Vuelta, en la que logró terminar en el podio en su debut en una carrera de tres semanas. Un dolor difuso que no era fácil de identificar ni de diagnosticar le ha mantenido fuera de juego mucho tiempo y le ha impedido volver a competir hasta ahora. Parece que está de vuelta al fin y es una noticia sensacional para el ciclismo en su conjunto, porque hablamos de una de las perlas jóvenes más brillantes y prometedoras del pelotón internacional.
Hoy Ayuso ha terminado segundo en la segunda etapa en línea de la prueba suiza, que ha concluido al sprint. Sí, sí, al sprint. Ayuso, más bien escalador, hombre de la general, ha estado muy activo en la parte final de la etapa. Atacó a tres kilómetros y medio de la meta, se mostró en la parte delantera del grupo principal en todo momento. Se le ve a Ayuso con ganas de demostrarse a sí mismo y de demostrar a los demás que está en forma, que aunque ese maldito dolor no ha desparecido del todo, él y su talento están de regreso.
Ethan Hayter, el gran velocista del Ineos, ha ganado la etapa y es el nuevo líder. Ha vencido por delante de Ayuso, sensacional, que ha protagonizado un sprint impresionante. “He hecho lo mejor que he podido y hay que estar feliz. Ayer sufrí pero hoy me he encontrado mucho mejor, aunque siento que aún no estoy a tope de forma”, ha declarado Ayuso en meta. Teniendo en cuenta que el de hoy es su tercer día de competición del año, y estamos en abril, que se encuentre ya entre los mejores, incluso en un sprint, es una señal magnífica.
El Tour de Romandía lleva tres etapas y tres lideres: Josef Cerny, del Soudal Quick Step, lo fue tras la etapa prólogo y su compañero de equipo Ethan Vernon hizo lo propio ayer en la primera etapa en línea que se resolvió al sprint.
Mañana, contrarreloj individual que será una buena prueba al estado de forma de Ayuso, que ahora es tercero en la general.
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