Toma 2 del duelo entre Jonas Vingegaard, ganador del Tour de Francia del año pasado, y Tadej Pogacar, el vencedor de las dos ediciones anteriores, el amo y señor del ciclismo mundial. El corredor danés que hace unos años trabajaba en una fábrica de pescado en su país y que se convirtió en vencedor de la carrera ciclista más importante del mundo, y el esloveno, estrella del pelotón, joven prodigio, caníbal del siglo XXI. El año pasado, Vingegaard venció gracias a su poderío y también a la fortaleza de su equipo. Este año no tendrá a su lado a Primoz Roglic, ganador del Giro esta temporada y pieza clave de la victoria del danés en la ronda gala. Será una baja sensible, pero aun así el equipo del Jumbo-Visma es muy potente, con Wilco Kelderman, Sepp Kuss, Nathan Van Hooydonck, Christophe Laporte, Tiesj Benoot, Wout Van Aert y Dylan Van Baarle.
Vingegaard llega al Tour con once victorias esta temporada, tras ganar tres etapas y la general de O Gran Camiño, otras tres etapas y la general de la Itzulia y dos etapas y la general del Dauphiné. Tadej Pogacar ha declarado que Vingegaard es el máximo favorito para esta temporada. Aunque el esloveno llega tras una caída en la Lieja-Bastoña-Lieja que le obligó a cambiar sus planes y que genera ciertas dudas sobre su estado de forma, no tengo tan claro que Vingegaard sea más favorito que él, siempre que esté del todo recuperado. Lo que sí parece claro es que los dos están un punto por encima del resto de aspirantes. Si Vingegaard suma ya once triunfos este año, Pogacar lleva 14 victorias: la Clásica Jaén Paraíso Interior, la Vuelta a Andalucía más tres etapas, la París-Niza más tres etapas, el Tour de Flandes, la Amstel Gold Race, la Flecha Valona y los campeonatos nacionales en ruta y contrarreloj de Eslovenia. Casi nada.
Pogacar tendrá a su lado en el equipo Emirates a Mikkel Bjerg, Adam Yates, Matteo Trentin, Vegard Stake Laengen, Felix Grobschartner, Rafa Majka y Marc Soler. Una escuadra de calidad para estar al lado del esloveno, el rey destronado el año pasado. No a la altura del Jumbo-Visma, pero de garantías.
El Tour 2023 sólo tiene dos favoritos y, a mucha distancia de ellos en teoría, un puñado de candidatos al podio. Entre ellos, Jai Hindley (Bora), vencedor del Giro el año pasado, Richard Carapaz (Education First), David Gaudu (Groupama-FDJ), Enric Mas (Movistar), el joven Mattias Skjelmose (Lidl-Trek), Romain Bardet (DSM), Ben O’Connor (Ag2r) o Mikel Landa (Bahrein).
Merece especial mención el Ineos que siempre es un equipo a tener en cuenta y que este año acude con Egan Bernal en su regreso tras la terrible caída que tanto ha trastocado su carrera, Carlos Rodríguez en su estreno en el Tour, Daniel Felipe Martínez (quizá el jefe de filas del equipo) y Tom Pidcock, quien despierta gran expectación tras su triunfo de etapa del año pasado. Un equipo muy potente que se completa con Michal Kwiatkowski, Omar Fraile, Ben Turner y Jonathan Castroviejo.
Otros nombres destacados de la carrera serán, entre otros, Thibaut Pinot (Groupama-FDJ), que correrá su último Tour en la temporada de su retirada; el todoterreno Mathieu Van der Poel (Alpecin); los velocistas Caleb Ewan (Lotto Dstny); Fabio Jakobsen (Soudal Quick Step), Mark Cavendish (Astana), que busca superar a Eddy Merckx en el récord de ciclistas con más triunfos de etapa; Alexander Kristoff (UnoX); Mads Pedersen (Lidl Trek); Jasper Philipsen (Alpecin); el gran Pello Bilbao (Bahrein); los también batalladores David de la Cruz y Luis León Sánchez (Astana); Ion Izagirre y Guillaume Martin como las grandes bazas del Cofidis; Simon Yates (Jayco) y tantos otros nombres, porque prácticamente todos los grandes corredores del mundo serán de la partida.
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