A sus 21 años, Iván Romeo acaba de conseguir hoy una victoria magistral en la tercera etapa del Critérium du Dauphiné. El ciclista del Movistar, que ya culminó con un poderío y una madurez impropias de su edad una fuga similar en la Volta a la Comunitat Valenciana, ha repetido hoy la jugada en la prueba por excelencia que sirve como preparación para el Tour de Francia para los mejores ciclistas del mundo.
Romeo no es sólo un ciclista excepcional, es que además tiene un perfil especialmente atractivo para los aficionados, porque es combativo, entra en fugas, sube bien y es todavía mejor en la contrarreloj, especialidad de la que es campeón del mundo sub23. Y es también un ciclista ambicioso cuyo techo es imposible de conocer. También parece gestionar bien la presión, no le parece molestar tener el foco encima. El vallisoletano está demostrando a marchas forzadas que es un ciclista talentoso al que tener en cuenta en las grandes ocasiones.
Hoy Romeo ha ganado en solitario una etapa preciosa en la que se formó una fuga de trece ciclistas formada por Axel Laurance, Michael Shea Leonard (Ineos Grenadiers), Brieuc Rolland (Groupama-FDJ), Florian Lipowitz (Red Bull-Bora-Hansgrohe), Julien Bernard (Lidl-Trek), Harold Tejada (XDS Astana), Mathieu Van der Poel (Alpecin-Deceuninck), Andreas Leknessund (Uno-X Mobility), Ed Dunbar (Jayco AlUla), Louis Barré (Intermarché-Wanty) y el propio Romeo.
Era una escapada con ciclistas de mucho nivel y que se entendieron entre ellos, lo que obligó al UAE de Tadej Pogacar, al Visma-Lease a Bike de Jonas Vingegaard y al Soudal-Quick Step de Remco Evenepoel a tirar del pelotón para intentar mantenerla bajo control. Los escapados colaboraron para llevar adelante la fuga y lograron llegar a la parte final de la etapa en situación de disputarse entre ellos el triunfo parcial. Y, una vez en esa situación, el más fuerte y también el más inteligente, el que mejor ha sabido resolver la carrera. Lo ha hecho de forma magistral. Se fue en solitario en el momento justo, a cinco kilómetros de meta, para llevarse el triunfo más importante de su muy incipiente y prometedora carrera como profesional.
Por si el triunfo parcial fuera poco, Romeo, con una sonrisa reluciente en meta, también se sitúa como líder de la general. Hoy ha contado en meta que es el mejor día del año para él y el día más bonito como corredor profesional.
Mañana vestirá en amarillo el ciclista del Movistar, que además lo hace muy bien en las cronos, por lo que tampoco es descabellado en absoluto pensar que pueda conservar la posición en la crono individual de mañana, un recorrido de 17,4 kilómetros. Tiene más de un minuto de ventaja sobre Pogacar, quien hoy se ha llevado dos segundos de bonificación en un sprint intermedio, en el que Evenepoel bonificó un segundo.
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