Al calor del verano australiano comenzó ayer el World Tour, como cada año, con el Santos Tour Down Under. La primera etapa, llana, se resolvió al sprint, con la victoria de André Greipel, quien se impuso en un apasionante duelo a Caleb Ewan y a Peter Sagan, quien había ganado dos días antes la mini clásica que da comienzo a estos días de ciclismo en Australia, la People's Choice Classic.
Antes de vivir el esperado sprint, los protagonistas del día fueron Nicholas Dlamini, William Clarke y Scott Bowden, quienes formaron una escapa que no llegó a buen puerto, ante el empuje de los equipos de los velocistas. Hoy, segunda etapa, destinada también al sprint.
Además del estreno de la temporada ciclista en Australia, ayer fue noticia también la puesta de largo de la Fundación Euskadi en Bilbao, con Mikel Landa como presidente. El corredor vasco del Movistar, la gran estrella de la cantera vasca en la actualidad, fue el maestro de ceremonias de la gala. Y habló con el corazón en la mano para explicar qué le ha llevado a dar este paso adelante. "Si me he metido en un jaleo como este es porque no creo un ciclismo sin Euskadi. He crecido soñando que corría en Euskadi y atacaba a Lance Armstrong. También he ido al Tour a animar al equipo en Pirineos. Este equipo es más que un ciclista corriendo, es una afición y una marea naranja", dijo. Y continuó: "quiero devolver a la Fundación todo lo que me ha dado. Tengo miedo de no estar a la altura de los socios, pero mi sueño es volver a ver a la Fundación en lo más alto".
El equipo vasco tendrá doce corredores y su director deportivo será Jorge Azanza. Los ciclistas que volverán a llevar el naranja por el pelotón, desde la Challenge de Mallorca, serán Egoitz Fernández, Iker Azkarate, Txomin Juaristi, Ibai Azurmendi, Juan Antonio López-Cózar, Mikel Alonso, Marc Buades, Diego López, Gotzon Martín, Peio Goikoetxea, Jon Ander Insausti y Ricardo García.
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