A veces las escapadas en las grandes vueltas tienen el futuro más o menos escrito. El pulso entre los fuegos y el pelotón es algo impostado, una cierta escenificación, en la que el gran grupo hace como que deja ir a los escapados, pero siempre lo justo, manteniendo las distancias controladas, mientras que los ciclistas que marchan en cabeza de carrera buscan sobre todo acaparar la atención de las cámaras, para que sus patrocinadores luzcan en televisión. Lo de hoy ha sido distinto, un auténtico pulso entre los escapados y el pelotón en el que se han impuesto aquellos. Venció David contra Goliat. Ganaron los buscadores de gloria, los fugados a los que el pelotón no dejó hacer, pero contra los que nada pudo hacer el gran grupo. Los días en los que el guión se rompe son los mejores y hoy hasta el final era imposible saber si los siete escapados supervivientes de la fuga inicial de 18 podrían disputarse entre ellos o no el triunfo final. Un gran día de ciclismo en territorio gallego, otro lugar que, al igual que sucede en Galicia, suele garantizar espectáculo y dureza.
Los escapados fueron Amezqueta, Aru, Bagioli, Cherel, Cort, Craddock, Denz, Kron, Oliveira, Padun, Polanc, Roux, Sánchez, Simmons, Soto, Stannard, Touzé y Vine. El grupo fue perdiendo unidades poco a poco, hasta que a 25 kilómetros del final quedaron solo Bagioli, Simmons, Oliveira, Cort, Craddock, Roux y Kron. Desde ese instante, la diferencia se mantuvo en el entorno del medio minuto. El DSM de Alberto Dainese no dio tregua a los fugados. Poco después entró a colaborar el BikeExchange de Michael Matthews. Lo intentaron ambos equipos pero no hubo manera.
En sprint reducido en el que se resolvió la prueba el ganador fue el gran favorito, Magnus Cort Nielsen, que suma así su tercer triunfo de etapa en esta Vuelta. Una victoria soberbia que celebró casi con más efusividad su compañero de equipo en la fuga que él mismo. Un triunfo excepcional, no sólo por el hecho que suma su tercera etapa, sino por la forma en la que lo ha conseguido, con ese pulso permanente con el pelotón.
Tristemente, el día también ha dejado una caída seria a 43 kilómetros del final, en la que se vio envuelto Louis Meintjes. Muy mala suerte, tras tanta lucha, caerse a falta de dos días para el final de la carrera, muy injusto, sobre todo, tras lo que luchó su equipo en pos de lograr un lugar destacado en la general para el corredor. Tuvo que abandonar, tan cerca ya de Santiago, del final del camino. Una lástima. Luego también se fue al suelo Ion Izagirre, afortunadamente, sin mayores consecuencias.
¿Y mañana qué? Última jornada en línea de la Vuelta, día con un recorrido final precioso, de constantes subidas y bajadas, con cinco puertos, incluido el de segunda en el que terminará la etapa, el Alto Castro de Herville. Hay escenario para ver batalla, aunque no parece realista esperar ataques de lejos del Movistar. Con sus dos hombres en el podio, cuesta imaginar que Enric Mas o Miguel Ángel vayan a poner en riesgo esa posición de privilegio en la general para intentar poner en aprietos a Primoz Roglic, el corredor más fuerte de esta Vuelta. Sería hipotecar lo que tienen, que es mucho, para buscar una misión casi imposible. Hay que entender también esa posición, aunque lo más admirado por los aficionados, lógicamente, sería una actitud más aguerrida. Cuesta mucho creer que mañana veamos un intento de asalto al primer puesto de la general. Sí estará en juego la posibilidad de que Jack Haig intente atacar precisamente para recortar distancias con Superman López y entrar en el podio de la carrera. También tiene que moverse para intentar entrar en el podio Egan Bernal. Queda igualmente abierta la clasificación de la montaña, que se llevará el DSM, bien con Storer bien con Bardet.
Antes del final de la antepenúltima etapa de la Vuelta se ha disputado la senda etapa de la Ceratizit Challenge by la Vuelta, un día muy importante en la lucha por la general, ya que la cronoescalada en la Estación Invernal de Cabeza de Manzaneda se presentaba muy dura. Annemiek Van Vleuten ha ganado la crono, como se esperaba, pero no ha logrado asaltar el maillot rojo de líder, que conserva Marlen Reusser tras un excepcional rendimiento en el día de hoy.
La ciclista suiza ha sido segunda en la etapa y apenas ha cedido 19 segundos con la corredora neerlandesa del Movistar. Tras la cronoescalada de hoy, Reusser cuenta con una ventaja de 1:36 sobre Pauliena Rooijakkers y de 1:39 con Annemiek Van Vleuten.
La etapa de mañana, penúltima de la carrera, será la última en la que Van Vleuten podrá intentar arrebatarle a Reusser el maillot rojo. Será un día rompepiernas con dos puertos catalogados como tales, incluido el Alto de A Lama, a mitad de etapa, pero con pocos metros llanos. Será una etapa en la que se debería ver batalla, antes de la jornada final en Santiago de Compostela, etapa llana que concluirá antes de la contrarreloj final de la Vuelta masculina. Van Vleuten ha declarado que mañana irá a por todas y ha recordado que no le gusta correr con actitud conservadora, así que podemos esperar una etapa emocionante. Eurosport la emitirá a partir de las 13 horas.
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