Ganna vuela y el Jumbo resiste ante Evenepoel

Filippo Ganna ha volado hoy por las calles de Valladolid. Sus 56 kilómetros por hora han estado fuera del alcance del resto de los corredores, incluido el campeón del mundo de la especialidad, Remco Evenepoel. Como se esperaba, el belga ha logrado sacar tiempo a todos sus rivales para la general, pero la renta de 19 segundos con Primoz Roglic se antoja escasa, sobre todo, con toda la montaña que queda por delante. 

El Jumbo-Visma sale reforzado de esta crono, al mantener el maillot rojo de Sepp Kuss. Aunque queda claro, como se intuía, que Jonas Vingegaard (décimo en la etapa a 1:18) no está en su mejor estado de forma, algo lógico viniendo del esfuerzo soberbio de ganar el Tour, se mantiene bien situado en la general y el equipo podrá jugar su baza. 

El conjunto neerlandés, abrumador dominador de esta carrera, mantiene intactas sus tres bazas. Su gran rival será el Emirates, también con tres corredores entre los mejores de la general después de la contrarreloj de hoy. Marc Soler se ha quedado a apenas 26 segundos del rojo tras hacer una magnífica crono (octavo a 1:12), en la que también han rendido a buen nivel los dos líderes de su equipo, Juan Ayuso (séptimo a 1:11 de Ganna) y Joâo Almeida (cuarto a 50 segundos). Entre los favoritos, el que peor contrarreloj ha hecho es Enric Mas, que ha cedido un minuto y medio con Evenepoel. Estaba claro que la contrarreloj le perjudicada, pero quizá esta pérdida de tiempo ha sido excesiva. Desde luego, teniendo en cuenta sus expectativas. 

Podría decirse, en todo caso, que la contrarreloj de hoy no ha dado grandes sorpresas y que el nivel ha sido altísimo. Quizá la mayor sorpresa ha sido Alekxandr Vlasov, quinto en la etapa a 52 segundos. El ciclista ruso del Bora pasa a ser décimo en la general a 3:14 de Kuss. 

¿Y cómo queda la general?  Pues como un duelo entre dos equipos poderosos: el Jumbo-Visma y el Emirates, con el vigente ganador de la carrera, Remco Evenepoel, en medio de esa disputa. No está nada mal. Kuss ha conservado el liderato y aventaja en más de un minuto a Evenepoel. La situación de la carrera es ideal para el conjunto neerlandés: con Kuss de líder, con Roglic, cuarto a sólo 27 segundos de Evenepoel y con Vingegaard séptimo a 1:13 del belga. Es decir, Evenepoel tiene que atacar para ser líder y cuenta con tres líderes, dos y medio, quizá. El belga es tal vez el que más claro tiene lo que debe hacer: debe correr al ataque sí o sí. El Jumbo-Visma puede perfectamente ser conservador mientras Kuss mantenga el maillot rojo, sabiendo que Roglic sigue siendo posiblemente el gran favorito a ganar la carrera, que ya ha vencido tres veces. 

La gran duda está en saber cómo correrá tácticamente el Emirates, porque es claramente el bloque más serio para rivalizar con los Jumbo. Soler está a sólo 26 segundos de Kuss, Almeida se encuentra a 2:16 del líder y a 1:07 de Evenepoel y Ayuso es octavo a 1:16 del belga. Por lo que transmiten en sus entrevistas, da la sensación de que el Emirates está decidido a correr como equipo y jugar con sus tres bazas. De lo que haga el equipo dirigido por Matxin dependerá en buena medida hacia donde se dirija la carrera y quién ganará la Vuelta. En la salida creía que Roglic era el gran favorito a ganar la prueba, hoy lo sigo pensando, pero la carrera está preciosa y queda la mayoría de la alta montaña que incluye el recorrido de esta edición de la ronda española. 

Mañana mismo, primer duelo en la montaña, con una etapa unipuerto con final en la Laguna Negra (6,5 kilómetros al 6,8% de desnivel medio) y un sprint bonificado justo antes de empezar la ascensión.