Joaquín Rodríguez se pone líder

Una pancarta avisaba a los ciclistas del infierno que les tocaba afrontar en la rampa final de la octava etapa de la Vuelta. La ronda española llegaba a San Lorenzo de El Escorial y lo hacía en un final terrorífico, con rampas de más del 20%. Hay que ir allí para verlo. Quien esto escribo asistió al final de etapa e hizo los dos últimos kilómetros (andando) de la etapa de ayer por el recorrido por el que horas después habrían de pasar los corredores. Ciertamente espectacular, durísimo. Había algún que otro valiente que sufría y se retorcía encima de la bicicleta emulando a los grandes ciclistas del pelotón ante los ánimos de todos. Gran ambiente en la línea de meta desde horas antes de la llegada de la carrera y, un año más, disfruté de todo lo que lleva tras de sí la Vuelta Ciclista a España. Si además de eso puedes presenciar a 50 metros de meta el final de etapa y visitas una localidad tan bella como San Lorenzo de El Escorial, se dan todos los ingredientes para pasar una gran mañana de sábado.

La Vuelta llegaba, en un paso fugaz, a la Comunidad de Madrid y lo hacía con un final espléndido. Cada día que pasa crece más mi admiración y respeto por los ciclistas. Estos deportistas, estos esforzados de la ruta que lo dan todo encima de la bicicleta y que ofrecen un espectáculo basado en su esfuerzo y sacrificio, que se entregan por completo y que hacen gozar a los aficionados. Un día más toca dar las gracias a los corredores ya que lograron que todos los que asistimos al final de etapa, y también los que lo siguieron por la televisión, pudiéramos disfrutar de un trepidante final de etapa. En la línea de meta fue llegando más y más gente según se acercaba el final. Nadie se quería perder ver a los corredores ascender ese repecho, qué digo repecho, ese auténtico muro en el que acababa la etapa de ayer. Un nombre en boca de todos: Joaquín Rodríguez, o más bien Purito, que es como más se le conoce y como todos le llaman. Él era el gran favorito a la victoria final y la gran esperanza española en esta Vuelta. Teníamos alguna duda de si podría estar afectado por la caída del día anterior, pero horas después le veríamos levantar los brazos en meta en señal de victoria.

La carrera venía con una fuga de varios hombres que intentaron, sin éxito, sorprender a un equipo Kathusa que sabía que tenía que esforzarse al máximo para llevar la carrera controlada para Joaquín Rodríguez hasta las rampas finales. El equipo ruso no se escondió y ésa fue la primera señal de que Purito iba a ir a por la victoria de manera clara en la etapa de ayer. neutralizada la fuga inicial, fueron otros corredores como Ángel Madrazo quienes lo intentaron, pero el Kathusa no estaba dispuesto a dejar que se escapara su tercera victoria de etapa en esta carrera y la posibilidad de que su líder se vistiera de líder. De esta forma, el pelotón iba perdiendo unidades a pasos agigantados por el duro ritmo marcado en cabeza y porque el camino hacia El Escorial no fue un camino de rosas precisamente, sino más bien duro y complicado para los ciclistas por las dificultades montañosas previas.

El speaker de la Vuelta, que había estado contando cómo venía la carrera y animando a los seguidores que estábamos en la parte final del recorrido, nos contó que los ciclistas llegaban a parte final de la etapa. Con la radio a punto, comencé a vivir los últimos kilómetros del octavo viaje de los corredores. Y fue Joaquín Rodríguez quien atacó con más fuerza, tanta que nadie le pudo seguir. Purito se iba por delante en busca de la victoria y sabedor de que podía vestirse de rojo. Cuando estaba llegando a meta miró hacia atrás, lo hizo para constatar que iba a ganar la etapa y que iba a sacar un tiempo precioso en este último muro amén de los 20 segundos de bonificación en meta. Levantó los brazos y celebró una victoria, la segunda en esta Vuelta, que sabe a gloria. Por detrás llegaron Scarponi, que se afianza como aspirante a la victoria, a 9 segundos, Mollema y Van den Broeck a 10, Fuglsang a 12 e Igor Antón, gran noticia ésta, sexto a 15 segundos. Mäs atrás llegaron otros aspirantes como Nibali.

Antes de seguir con la crónica, así es cómo queda la general tras el triunfo de Joaquín Rodríguez en el muro de San Lorenzo de El Escorial:

1-Joaquín Rodríguez.

2-Dani Moreno a 12".

3-Jakob Fuglsang a 14".

4-Vincenzo Nibali a 25".

5-Fredik Kessiakoff a 34".

6-Jurgen Van den Broeck a 36".

7-Sylvain Chavanel a 40".

8-Maxime Monfort a 41".

9-Michele Scarponi a 43".

10-Bauke Mollema a 48".

11-Marzio Bruseghin a 49".

12-Mikel Nieve a 54".

13-Kevin Seeldrayer a 56".

14-Haimar Zubeldia a 47".

15-Sergio Pardilla a 1:07.

16-Janez Brajkovic a 1:13.

17-Juan José Cobo a 1:21.

18-Luis León Sánchez a 1:23.

19-Konstantn Sivtsov a 1:26.

20-Bradley Wiggins a 1:28.

De Villacastín sale la etapa de hoy para llegar a la Sierra de Béjar. Final en alto por lo tanto para hoy. Servirá para ver cómo están los grandes aspirantes al triunfo final. Antes de que llegue, ya estoy lamentando que la crono de Salamanca sea tan larga. No porque perjudique a Joaquín Rodríguez, sino porque no me gusta que las grandes vueltas que tienen mucha montaña se terminen decidiendo de forma casi total en una contrarreloj larga. Las cronos excesivamente larga suelen matar las carreras. Veremos qué sucede en este caso.
Para acabar, sólo quiero decir que el día de ayer en San Lorenzo de El Escorial fue muy agradable. Visitar esa localidad ya lo es de por sí, pero conjugar el interés turístico con el deportivo hicieron del sábado un gran día para mí y para muchos aficionados que acudimos hasta allí para poder ver el paso de la carrera ciclista más importante de nuestro país. Es nuestra Vuelta y hay que mostrarle nuestro cariño y nuestro apoyo. También nuestro agradecimiento por su esfuerzo en hacer recorridos interesantes y finales de etapas vibrantes. Sigue la Vuelta.