Ayer comenzó la Tirreno-Adriático, la carrera italiana que es conocida, por motivos obvios, la carrera de los dos mares. Pues bien, entre dos aguas estamos los aficionados al ciclismo desde ayer. Pendientes de dos carreras de altísimo nivel: la París-Niza y la Tirreno-Adriático. La carrera francesa la podemos seguir en abierto por Teledeporte, ambas carreras en el canal de pago Eurosport y la italiana también se puede seguir a través de Internet, así que van a ser estos unos buenos días de ciclismo. Lo están siendo ya.
En Francia ayer se disputó la cuarta etapa de la París-Niza. Acababa en alto, pero tenía menos dureza el final que el de la jornada precedente. La fuga del día corrió a cargo de Jean-Christophe Péraud, Pierre Frédigo, Leigh Howard, Bart De Clercq y el español Luis Ángel Maté, que pasó primero por varios puertos de tercera categoría y se sitúa líder de la clasificación de la montaña, por lo que vestirá el maillot blanco a puntos rojos en el día de hoy. Los escapados fueron neutralizados por el pelotón a unos 20 kilómetros del final. Varios equipos pusieron un ritmo frenético en la cabeza del grupo, entre ellos el español Movistar. Cuando quedaba poco más de un kilómetro para el final atacó el alemán del RadioShack Andreas Kloden, que no pudo conseguir la victoria y a quien se le hizo dura y larga la rampa final.
Dos españoles, Alejandro Valverde y Xabi Florencio, buscaron el triunfo ayer. El primero se quedó muy cerrado y en ningún momento logró entrar en la lucha por la etapa (acabó octavo), mientras que el corredor del Kathusa acabó cuarto. Quien alzó los brazos fue el ciclista belga del Lotto Gianni Meersman. Para él fue el triunfo de etapa por delante de Bole y Westra. La clasificación general no varió ayer, pero hoy sí habrá ocasión de ver a los aspirantes al triunfo dando la cara, porque la etapa promete. Se tomará la salida desde Onet-le-Chateau camino de Mende. Serán 178,5 kilómetros de etapa con seis puertos, dos de tercera, uno de segunda y tres de primera. Acabará en alto en el puerto de primera La Croix Neuve. Hoy, por lo tanto, puede ser un gran día de ciclismo en la París-Niza.
Y mientras tanto, en Italia, arrancó ayer la Tirreno-Adriático con una contrarreloj por equipos en la que ganó con autoridad el GreenEdge, que sacó 17 segundos a equipos tan potentes como el RadioShack o el Garmin. En la cuarta plaza acabó el Sky, que cedió 23" en los 16,9 kilómetros que separaban la salida de la localidad de San Vincenzo y la de Donoratico. El autraliano Matthews Goss fue quien cruzó primero la línea de meta de su equipo, por lo que es el primer líder de la ronda italiana. Mal día para el BMC de Evans, que se dejó casi un minuto; y para los equipos españoles Movistar ( a 1:11) y Euskaltel (1:18). El Kathusa ruso, liderado por Freire y Joaquín Rodríguez en esta carrera, acabó en el octavo puesto al perder 40 segundos con el GreenEdge. Hoy se disputa una de esas etapas de un recorrido excesivamente largo, 230 kilómetros.
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