Con el Tour de Flandes en el horizonte (el próximo domingo), la actualidad ciclista pasa estos días por otros lares, como Los Tres Días de La Panne. Con la mirada puesta en el Tour de Flandes, precisamente, ayer ganó la primera de las tres etapas de esta carrera el eslovaco del Liquigas Peter Sagan. Es un corredor formidable y cada nueva victoria suya no hace sino confirmar lo alto que puede llegar este joven ciclista de 22 años. Casi hasta donde se proponga, me atrevería a decir, porque tiene potencial para casi cualquier reto. Ayer ganó la etapa de 201 kilómetros en un esprint en el que se impuso a los italianos Jacopo Guarnieri (Astana) y Fabio Sabatini (Liquigas). Las bonificaciones en meta colocan a Sagan líder con cuatro y seis segundos de ventaja sobre estos corredores. Hoy se disputará la segunda etapa, de 216,1 kilómetros.
Por otro lado, ayer se presentó el recorrido del Critérium del Dauphiné, la última gran prueba de preparación para el Tour de Francia. Se disputará del 3 al 10 de junio y presenta un recorrido interesante con dos finales en alto y dos etapas contra el reloj. El primer día se disputará en Grenoble una etapa contrarreloj individual prólogo de 5,7 kilómetros. Ya el segundo día de competición se presenta el primer final en alto, en Saint Vallier. En la cuarta etapa se disputará otra crono. Será de 53 kilómetros, para mi gusto, extremadamente larga, y más en una carrera de una semana, porque puede marcar diferencias insalvables. En todo caso, la sexta etapa presenta un recorrido explosivo con siete puertos, terreno de sobra para plantear batalla. Aunque no se acaba en alto, sino en Morzine, será un gran día de ciclismo (eso invita a pensar el recorrido) y probablemente la etapa reina de la carrera. Para el último día dejan los organizadores el segundo final en alto con la etapa Morzine-Chatel.
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