Mañana se disputa el Mundial en ruta en la categoría élite masculina. El equipo español es de la partida con un combinado exquisito compuesto por Alberto Contador, Óscar Freire, Alejandro Valverde, Samuel Sánchez, Joaquín Rodríguez, Dani Moreno, Juan Antonio Flecha, Pablo Lastras y Jonathan Castroviejo. Una escuadra de lujo, tal vez con demasiados líderes. Será importante la estrategia que se adopte y para ello creo que es importante salir con las cosas claras. Está genial tener muchas bazas, y desde luego ninguna selecció tendrá tantas como España, pero creo que se debe determinar de antemano quiénes son los líderes claros en la carrera y qué papel deberá jugar cada uno. Estamos hablando de una carrera larga en la que se pueden dar muchas circunstancias para las que hay que estar preparados.
Empezamos esta previa precisamente por el equipo español, por cómo llega y cuáles son las sensaciones de los ciclistas y el seleccionador. Como digo, partimos con muchos corredores a los que el recorrido les va bien y que llegan con aspiraciones de destacar en el Mundial. Por eso será importante el reparto de roles y que todos sean capaces de tener clara la estrategia y de trabajar para un compañero llegado el caso. Alejandro Valverde es señalado por muchos como el gran favorito y ciertamente el recorrido le va muy bien y pensamos que puede estar en la pomada. Lo mismo digo de Joaquim Rodríguez. Pero es que Óscar Freire ha ganado tres Mundiales y va a por el cuarto. El cántabro siempre es un corredor de garantías en esta prueba. Y Contador, pese a la mala imagen que dio en la crono, también puede jugar un papel importante en la carrera. Samuel Sánchez, con la duda de ver cómo está físicamente, es tod un campeón olímpico y este tipo de carreras le van muy bien. Tener el podio de la pasada Vuelta, un ciclista tres veces campeón del mundo y un campeón olímpico en el mismo equipo es un auténtico lujo, pero que hay que saber gestionar bien.
José Luis de Santos, seleccionador nacional, cree que Valverde es "la baza más sólida". El murciano ha dicho estos días que se encuentra bien y que llega a Limburgo a "hacer el mejor resultado posible". Dice estar bien física y mentalmente porque "he descansado bien, he recuperado bien y he entrenado bien. Y eso es porque las sensaciones son buenas. No he terminado fundido la Vuelta y me quedaban ganas de entrenar". Valverde se ve arriba. Purito, también. El tercer clasificado de la Vuelta lo tiene claro: "es un circuito que me va de maravilla". Sobre esa acumulación de líderes en el equipo español, Joaquim Rodríguez asegura que "si es un Mundial traicionero desde el principio, tendremos que repartirnos las leches entre todos. Pero si es más tradicional, cuanto más lleguemos con opciones al final, mejor. No creo que sea un problema". En efecto, a España le conviene un Mundial que no esté alocado y que llegue lo más controlado posible al final, porque tiene más y mejores rematadores que el resto de selecciones.
Óscar Freire, ganador del Mundial en los años 1999, 2001 y 2004, busca hacer historia en la cita de Limburgo y, además, liga su retirada a lo que suceda mañana ya que, si gana, seguirá un año más porque "no puedo desperdiciar una oportunidad como esta. Ya he llevado el arcoiris y es algo especial a lo que no puedo renunciar". Dice estar recuperado de la lesión que le apartó de los Juegos Olímpicos. Para él, de los españoles quien más opciones tiene es Valverde pero también afirma que "he venido aquí para ganar y sé que es difícil, pero no lo descarto. Es un final que me va mejor que el de años anteriores". El cántabro, preguntado sobre la necesidad de tener un líder claro, responde que "siempre hemos tenido un equipo fuerte, pero sólo puede ganar uno".
Contador, por su parte, cree que "cuantos más líderes, mejor". En cuanto a sus opciones, dice que habrá que ver cómo transurre la carrera, pero reconoce que "si al final estoy ahí, soy consciente de que hay corredores más rápidos que yo".
Vamos con el recorrido del Mundial. Es el que vemos arriba, con el mapa y el perfil de la prueba. Los ciclistas tendrán 100 kilómetros con varias cotas al comienzo de la prueba hasta que entren en el circuito con el Cauberg como ascensión protagonista al que tendrán que dar 10 vueltas. Ahí se decidirá el Mundial. Son 267 kilómetros en total. El circuito consta de 16,5 kilómetros y su parte final transcurre por el recorrido habitual del desenlace de la Amstel Gold Race. La gran diferencia es que el Mundial no acabará en la cima del Cauberg, sino que se descenderá algo más de un kilómetro y medio hasta la meta. Es un recorrido que va muy bien a corredores como Purito o Valverde, aunque el hecho de que no termine arriba y se descienda también da opciones a otros hombres rápidos que puedan superar la cota como Boonen, por ejemplo.
Si de participación hablamos, el equipo belga será una formación a seguir, al igual que Italia, otra selección referente en este tipo de pruebas. Nombres propios son los belgas Philippe Gilbert y Tom Boonen, el eslovaco Peter Sagan, el italiano Vincenzo Nibali o el australiano Simon Gerrans, entre otros. Nunca se pueden descartar sorpresas como la que vimos recientemente en los Juegos Olímpicos, con ese oro inesperado para Vinokourov. Si tengo que mojarme, aún a riesgo de errar, y dar un grupo de cuatro ciclistas como grandes favoritos, desde mi punto de vista son: Gilbert, Sagan, Valverde y Purito. Veremos.
La competición no para en Limburgo a espera de esta cita de la que hemos hecho la previa en distintas categorías. Como por ejemplo en la categoría juvenil femenina, donde el oro fue para la británica Lucy Garner, la plata para la noruega Eline Gleditsch Brustad y la medalla de bronce para la italiana Anna Zita Maria Striker. Las españolas Sheyla Gutiérrez y Eider Merino fueron séptima y décimo tercera respectivamente.
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