Hoy comienza en tierras suiza el Critérium Dauphiné, prueba que nos ofrecerá el último duelo ente algunos de los grandes favoritos a la victoria del Tour de Francia. Destaca por encima del resto el cara a cara entre Froome y Contador, aunque como muy bien ha señalado el pinteño, no es éste ni mucho menos el único atractivo de la ronda francesa que servirá de preparación para el Tour. Lo hemos reseñado aquí en un par de entradas previas relativas a la excelente participación de esta edición del Dauphiné y al atractivo recorrido que presenta, respectivamente. Como siempre, en este blog seguiremos de cerca la actualidad del ciclismo, lo estrictamente deportivo, por lo que cada día tendremos una crónica de la etapa correspondiente de la prueba.
En este artículo, sin embargo, quiero hablar de otro asunto subyacente, pero muy importante, que es el de la emisión de carreras ciclistas en televisión. Cada vez menor, cada día más infrecuente. La no emisión por ningún canal en abierto de este Critérium Dauphiné es un nuevo palo para los aficionados al ciclismo. Aviso desde ya que esta entrada tendrá más preguntas que respuestas, aunque no quiero caer en el pataleo habitual por el trato ofrecido al ciclismo, que entendemos injusto, y sí deseo mostrar algunas reflexiones sobre esta cuestión.
Teledeporte, el canal temático de la pública TVE, ha sido estos últimos años la único emisora nacional que ha ofrecido carreras ciclistas. Cierto es que cada vez ofrece menos. El primer momento de cabreo de la temporada suele llegar con las clásicas de primavera. El ente público no tiene derechos de emisión de algunas de las más brillantes pruebas de esta época del año, por lo que nos quedamos sin verlas en abierto en España. Sólo los habitantes de algunas regiones (el País Vasco se lleva la palma con la decidida apuesta por el ciclismo de ETB) y las personas que se pueden permitir estar suscritos a un canal de pago (Eurosport es la casa del ciclismo en nuestro país, ahora mismo) han podido seguir, por norma general, los más grandes acontecimientos de la primera parte de la temporada.
El Giro de Italia se emitió en abierto para todo el Estado por última vez en 2011, con aquella formidable exhibición de Alberto Contador en la extinta Veo 7. Un año después, Marca TV, canal propiedad de Unidad Editorial (controlada al 95% por RCS, compañía que también está presente en RCS Sport, la organizadora del Giro) y de Mediapro. Todos esperábamos verlo en directo, pero optaron por resúmenes. Este año ha sido peor. Sólo canales autonómicos como ETB, TPA, TVGA y Esport3 emitieron la prueba italiana en abierto. Una vez más, los que no están abonados al canal de pago Eurosport tuvieron que buscarse la vida en Internet. Fundamentalmente, siguieron la carrera por streaming a través de la web de la ETB o de la RAI, cuya emisión no estaba geo-restringida.
Poco a poco, el Giro ha ido dejando de ser un evento con presencia habitual en el canal público. Todos recordamos cómo en 2008, primera victoria de Contador en el Giro, TVE sólo emitió las tres últimas etapas, cuando el corredor español vestía ya la maglia rosa. Actuaron rápido, pero ese movimiento demostró la situación muy delicada de nuestro deporte, en cuando a presencia televisiva se refiere. Estamos hablando de dinero, claro. Algo fundamental para la supervivencia del deporte. Junto al Giro, progresivamente cada temporada se ofrecen menos pruebas ciclistas en abierto a nivel nacional en España.
Ningún canal privado generalista se ha interesado desde hace muchos años por el ciclismo. Muy lejos queda aquel Giro triunfal de Indurain con Telecinco ofreciendo la carera italiana. De los últimos tiempos, la única presencia de las bicicletas en canales privados fue la esporádica emisión de un campeonato nacional de ciclismo en La Sexta, en los inicios del canal y ligado a su estrecha vinculación con el deporte (fútbol, baloncesto, etc.) que caracterizó a esta televisión en sus inicios. Poco más. Aquella Vuelta a Castilla y León que ofreció Marca TV, el referido Giro de Veo 7 y pare usted de contar.
¿No sería rentable para canales como Energy o Nitro, por poner un par de ejemplos de nuevos canales de la TDT, emitir carreras ciclistas de primer orden? De momento, ninguno de los dos grandes grupos televisivos actuales (Mediaset y A3Media) han mostrado el más mínimo interés por hacerse con los derechos de ninguna prueba ciclista. Si no lo han hecho hasta ahora, no hay motivos para pensar que lo puedan hacer en el futuro. Todas las miradas, pues, se centran en los canales públicos. En los autonómicos que, como ETB, TPA, TVGA y Esport3, emiten carreras ciclistas como el Giro, y en el canal estatal TVE. Sobre las televisiones autonómicas, hay que decir que muchas de ellas están en una situación económica desastrosa. La situación financiera de TVE está detrás también de la ausencia de nuevas carreras ciclistas en su canal temático Teledeporte.
En una entrevista de Pablo Bosch a Carlos de Andrés, director del Teledeporte y voz del ciclismo en el canal, se le preguntaba por esta cuestión. La entrevista es de febrero de este año. Carlos de Andrés asegura que en Teledeporte se verán "Tour de Francia, Vuelta a España y todas las carreras asociadas a Tour". ¿No es el Critérium Dauphiné una carrera asociada al Tour, organizada por ASO? Sí, lo es. Por eso me descuadra bastante la no emisión de esta prueba por Teledeporte. El asunto de los derechos televisivos es un tema complicado y fascinante. Pero todos crecíamos que Teledeporte tenía los derechos de emisión de las pruebas organizadas por ASO. Así ha sido hasta el momento. Una de dos, o sucede algo extraño con el Critérium Dauphiné, o a pesar de poder emitirla, TVE opta por no hacerlo.
En la citada entrevista, el director de Teledeporte explica que "estamos intentando tener más carreras, pero es difícil porque no tenemos mucha disponibilidad económica y tenemos que buscar pequeños trucos y recursos a través de esponsorizaciones y cosas así". En efecto, la crisis está detrás de todo esto.
Para que un evento deportivo resulte interesante para un canal, se tienen que dar, al menos, dos condiciones: que atraiga un nivel de audiencia considerable y que su precio no sea desorbitado. Según una noticia de 2010, TVE paga 4 millones de euros por la Vuelta Ciclista a España. La audiencia media de la ronda del año anterior fue de 6,6%, por lo que en el artículo citado se dice que es una emisión no rentable. En cualquier caso, la audiencia que da el ciclismo en televisión es razonablemente buena. Muy buena, diríamos, cuando llegan las grandes etapas de montaña de las carreras más importantes. Sucede como con el resto de deportes. No tiene la misma audiencia un Real Madrid-Barcelona que un Betis-Granada. Pues no tiene la misma repercusión una etapa llana con poca historia que una jornada montañosa, o una carrera en la que la participación no sea tan estelar como se desearía que otra en la que, como este Critérium Dauphiné, estén casi todos los nombres destacados del pelotón internacional.
Un par de ejemplos sobre la audiencia que logra el ciclismo. Etapa reina del Tour 2012. La emisión por La 1 de TVE logra un 14,2% de share (1.625.000 espectadores). La octava emisión más vista del día, la mejor de su franja horaria. Vuelta a España 2012. En un detallado análisis, el canal Vertele informa de que la ronda española triplicó su audiencia del año anterior y alcanzó unos extraordinarios datos: 1,6 millones y 13,7% de cuota de pantalla de media. Sus grandes etapas de montaña lograron cifras inconmensurables. La penúltima etapa con final en la Bola del Mundo se fue hasta los 2.535.000 espectadores con un 20.9% de share. O la etapa del Cuitu Negro, con 2.572.000 espectadores y un 19,5% de cuota de pantalla.
En ese informe de Vertele podemos comprobar la audiencia media de la Vuelta desde 1997. Son estos datos:
1997: 27,6%.
1998: 9,9% (La 2)/ 25,8% (La 1)
1999: 10,5% (La 2)/ 24,1% (La 1)
2000: 10,9% (La 2)/ 26,2% (La 1)
2001: 10,9% (La 2)/ 27,7% (La 1)
2002: 7,4% (La 2)/ 22,1% (La 1)
2003: 8,5% y 905.000 (La 2)/ 23,5% y 2.275.000 (La 1)
2004: 7,4% y 841.000 (La 2)/ 20,6% y 2.048.000 (La 1)
2005: 7,4% y 850.000 (La 2)/ 19,3% y 1.976.000 (La 1)
2006: 7,8% y 921.000 (La 2)/ 13,7% y 1.435.000 (La 1)
2007: 6,6% y 754.000 (La 2)
2008: 7,4% y 794.000 (La 2)
2009: 6,5% y 763.000 (La 2)
2010: 4,3% y 461.000 (Teledeporte)
2011: 4,6% y 542.000 (Teledeporte)
20012: 13,7% y 1.600.000 (La 1)
Estos datos reflejan que la Vuelta alcanzó cuotas del 20% cuando se emitía la parte final por La 1. Hay que decir que en los datos de 2007-2011, al emitirse todo por un único canal, baja el porcentaje de audiencia notablemente. No sólo porque esas ediciones fueran menos seguidas, que también, sino porque cuando se daba un corte de la etapa y sólo se emitía por La 1 la parte final, la última hora y pico de carrera, lógicamente la audiencia era mayor que en la parte anterior, a muchos kilómetros de meta, en la que sólo los muy aficionados nos pegamos al televisor.
Sobre el Tour, sólo un par de datos más, por no abrumar. Año 2007, primer Tour de Contador. La anodina última etapa en París fue vista por 2.090.000 espectadores (20.6%). Edición de la Grande Boucle del 2010. Duelo entre Contador y Andy Schleck. 3.084.000 espectadores siguen la etapa contrareloj Bourdeaux-Paullicac. Un 27.4% de share.
Sirvan estos datos para demostrar que el ciclismo sí es un deporte que da audiencia en España. Cuando ofrece un gran espectáculo, como ocurre con todos los demás. Este artículo, como decía arriba, no pretende dar respuestas ni ofrecer claves sobre la menguante presencia del ciclismo en la televisión. No podemos dejar de lado tampoco el factor polémicas por el dopaje, que sin duda también afecta. Sólo busco ofrecer algunos datos y reflexiones. Como bien dice el director del Giro en una excelente entrevista que publica Cobbles&Hills, Michele Acquarone explica que "desde el punto de vista del mercado televisivo, la situación en España es complicada. Lo ideal sería que lo emitiera TVE, pero a lo mejor mañana es más importante emitirlo en Youtube España".
Es muy interesante esa puerta que abre el mandamás del Giro. Internet, esas nueva ventana que todos los deportes deben aprovechar y por el que probablemente puede pasar la emisión futuro de pruebas ciclistas y de otras disciplinas. Ya hoy, buscarnos la vida por Internet, con enlaces de distinta procedencia y categoría, es la única forma que tenemos muchos de seguir la mayoría de las carreras. Que esto se convierta en una emisión regular y establecida a través de alguna plataforma online como Youtube puede ser el futuro, por supuesto. Pero, a día de hoy, la influencia de la televisión, su penetración en la población, es muy superior a la Internet. Sigue siendo necesaria y, por eso, continúa siendo lamentable que pruebas como el Critérium Dauphiné no se vean en abierto.
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