Todo lo que ha tenido de aburrido el recorrido de la séptima etapa del Tour lo ha tenido de apasionante su desenlace. Por photo finish, con un final tremendamente apretado, Marcel Kittel (Quick-Step Floors) se ha llevado la tercera victoria en la presente edición de la ronda gala, por delante de Edvald Boasson Hagen (Dimensión Data). Los jueces de carrera tienen acceso a las imágenes de la photo finish con todo lujo de detalles y así es cómo han otorgado la victoria a Kittel, pero por las imágenes vistas en televisión es imposible saber quién ha cruzado antes la línea de meta. Un final impresionante.
Antes del sprint, donde volvieron a verse las caras los hombres rápidos de la carrera, se siguió el guión no escrito de estas largas etapas llanas del Tour. Se formó la escapada de turno, a la que el pelotón jamás ha dado opciones de llegar a meta escapados. Manuele Mori (UAE Team Emirates), Yohann Gène (Direct Energie), Dylan van Baarle (Cannondale-Drapac) y Maxime Bouet (Fortuneo-Oscaro) ) compusieron la fuga. Los cuatro han encabezado la carrera durante buena parte de la etapa, pero finalmente han sido neutralizados, con los equipos de los velocistas tirando a bloque.
Todas las escuadras de los hombres rápidos de la Grande Boucle han trabajado con fuerza, cada uno a su aire, en los kilómetros finales. El treno del Quick-Step Floors se ha puesto al mando y Kittel ha hecho bueno su trabajo en la llegada masiva más apretada que se recuerda. El corredor alemán iguala así a su compatriota Erik Zabel como el ciclista germano con más triunfos parciales en la carrera gala, con doce.
Tras dos etapas más bien anodinas, de las que Kittel ha sacado petróleo con sendos triunfos, mañana vuelve la montaña. Allí se verá si Froome conserva el amarillo y si Aru confirma la fortaleza exhibida en La Planche des Belles Filles.
La etapa de mañana presenta tres puertos de montaña: uno de tercera, otro de segunda y uno de primera, la Côte de la Combe de Laisia Les Molunes, con su cima a 11 kilómetros de meta.
Comentarios