El primer día montaña de lo que va de temporada no ha defraudado. El día empezó con incertidumbre, porque la nieve caída en el Mont Ventoux llegó a poner en riesgo la tercera etapa del Tour de la Provenza. Afortunadamente, aunque hubo que recortar algo el recorrido, sí se pudo disputar la jornada, que ha resultado tan decisiva para la general y tan atractiva como se esperaba. La ascensión final ha sido un auténtico festival colombiano, por obra y gracia de Iván Ramiro Sosa, ganador de la etapa y nuevo líder de la carrera, y de su compañero de equipo en el Ineos, Egan Bernal, segundo en la etapa.
Las intenciones del Ineos estaban claras. El equipo británico se alteraban en la cabeza del grupo con el Astana de Alexandr Vlasov, buscando ambas escuadras endurecer la carrera. También andaba por ahí el Deceuninck-Quick Step, que sabía que perdería el liderato de Davide Ballerini, pero que quería jugar su baza con Julian Alaphilippe, el campeón del mundo que tanto va a lucir y honrar el maillot arcoíris este año con su espíritu aguerrido, siempre valiente, constantemente al ataque. Para el Ineos trabajó un soberbio Carlos Rodríguez, mientras que Omar Fraile y Gorka Izagirre hacían lo propio para su líder en el Astana y el joven Mauri Vansevenant, para Alaphilippe.
Para cuando las rampas de la subida final asomaban en el horizonte, los últimos supervivientes de la escapada del día ya habían sido cazados. Sabían que tenían poco hacer en un día como hoy, pero aun así lo intentaron y se dejaron ver en la fuga. Formaron la escapada Vermeersch (que ya atacó ayer), Cousin (ídem), Gaudin, Bagioli, Louvet y Fedeli. Su aventura no tuvo éxito y los equipos de los grandes favoritos a la victoria se pusieron al frente del grupo.
El ataque decisivo llegó a 4,7 kilómetros de la cima. Lo firmó Iván Ramiro Sosa, la primera baza del Ineos, mientras Bernal se mantenía a la expectativa por detrás. Nadie saltó a por Sosa y él abrió suficiente hueco para ganar la etapa y ponerse líder. A poco más de tres kilómetros del final aceleró Alaphilippe, lo dicho, siempre al ataque, y a su rueda se pegó sin inmutarse Bernal. Definitivamente, el colombiano ha vuelto. Poco después llegó a la altura de ambos Wout Poels.
Mañana, cuarta etapa en la que no debería haber cambios en la general. Bernal es líder con 19 segundos de ventaja sobre Egan Bernal, 21 segundos sobre Alaphilippe y 39 segundos sobre Poels. Mañana también será el primer día del año con dos pruebas ciclistas a la vez: esta cuarta etapa de la prueba francesa y la Clásica de Almería, que emitirá Eurosport.
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