2 de octubre de 2021. Hoy es un día histórico para el ciclismo femenino, es decir, para el ciclismo. Hoy se ha disputado la primera edición de la París-Roubaix Femmes, la edición femenina del Infierno del Norte, para muchos aficionados a este deporte, la clásica más dura y emocionante del mundo. Alejada de sus fechas habituales, porque se tuvo que suspender en primavera por culpa de la situación de la pandemia de Covid-19 entonces, hoy al fin ha llegado el fin de semana de sesión doble de Parí-Roubaix. Era máxima la expectación ante esta primera edición de mujeres de la clásica y no ha decepcionado, todo lo contrario, ha superado incluso las expectativas.
A las corredoras les ha tocado un día dantesco de lluvia, viento y frío para estrenarse en este monumento. Un día de mucha exigencia, con los tramos adoquinados llenos de barro, con mucho viento a su paso, con el riesgo constante de caídas y problemas mecánicos. Han sido múltiples los incidentes, porque este tipo de pruebas son, por encima de todo, carreras de supervivencia. Se fue al suelo la campeona del mundo, Elisa Balsamo, y también la campeona europea, Ellen Van Dijk. Las piedras de la París-Roubaix no respetan a nadie, la dureza del Infierno del Norte es la misma para todas.
Muy lejos, lejísimos, a más de 45 kilómetros del final, se quedó sola en cabeza Lizzie Deignan. Fue un ataque atrevido, muy valiente, casi kamikaze. La ciclista del Trek se marchó hacia adelante en solitario y alcanzó una ventaja próxima a los tres minutos. Cuando restaban 17 kilómetros para el final, y tres tramos empedrados por delante, incluido el temible Carrefour de l’Arbre, saltó Marianne Vos y nadie pudo seguirla. Fue entonces cuando se produjo una caída numerosa en la que se vio afectada Van Dijk.
La italiana Elisa Longo Borghini, siempre combativa, compañera de Deignan en el Trek, intentó sin éxito llegar a la altura de la corredora neerlandesa. Iban una a una. Puro París-Roubaix, puro ciclismo. Vos recortó diferencias con la ciclista que marchaba en cabeza, pero no lo suficiente como para darle caza. Deignan, que este año tenía como única victoria en su palmarés la Vuelta a Suiza, entró en el velódromo de Roubaix triunfal, vencedora en la primera edición femenina de la historia de esta carrera. Le acompañaron en el podio Vos y Longo Borghini. Las tres son onscientes de que la carrera de hoy tenía una trascendencia especial, que ellas acababan de escribir una página importante de la historia del ciclismo femenino, es decir, del ciclismo.
Hoy también ha sido un día feliz para Mavi García, ganadora en solitario del Giro dell’Emilia.
Comentarios