Posiblemente no hay ningún otro ciclista en el pelotón internacional capaz de lograr lo que logró Wout Van Aert en la pasada edición del Tour de Francia. Dinamitó la carrera convirtiéndola en una clásica, en aquella etapa gloriosa en la que se alió con su enemigo íntimo Mathieu Van der Poel para divertirse y divertirnos, ganó una etapa de montaña (nada menos que en el Mont Ventoux), la contrarreloj del penúltimo día y el sprint final en París. Y todo eso, además, sin dejar de trabajar para sus líderes, en este caso, más Jonas Vingegaard que Primoz Roglic, por el abandono del esloveno. Fue una hazaña sin antecentes históricos. Un rendimiento estratosférico en la carrera más importante del mundo, en la que Van Aert volvió a demostrar que es el ciclista más polivalente del mundo.
Ya sólo por ese colosal Tour de Francia que firmó el belga merece estar en esta serie de artículos de los mejores del 2021. Pero hay más. Mucho más. Inauguró su palmarés con dos triunfos de etapa en la Tirreno-Adriático que, un año más, volvió a ser una de las pruebas más emocionantes del calendario. Siguió después con sendos triunfos en la Gante-Wevelgem y en la Amstel Gold Race. Llegó al Tour enfundado en el maillot de campeón belga en ruta, tras imponerse también en esa prueba.
Tras su hazaña en la ronda gala aún le faltaban por conseguir cinco de sus trece victorias este año, ya que se llevó la general y cuatro etapas de la Vuelta a Gran Bretaña.
Van Aert también fue protagonista de los Juegos Olímpicos de Tokio y de los Mundiales de Flandes, ya que en ambos casos se llevó una plata, la de la prueba en ruta olímpica y la de la contrarreloj mundialista. Un año, en fin, de auténtico ensueño. Si recordaremos este 2021 como una temporada especialmente atractiva, en gran medida será gracias a Van Aert.
Mañana, Egan Bernal.
Comentarios