La etapa final del Tour de los Alpes, que se ha disputado bajo la lluvia y con un tiempo de perros, ha sido en cierta forma un doble duelo francoespañol que se ha solventado del lado de los corredores galos. De un lado, la lucha por la etapa, en la que Thibaut Pinot se ha impuesto ante David De la Cruz; del otro, la batalla final por la general, en la que ha alcanzado la victoria y ha desbancado del primer puesto e incluso del podio a Pello Bilbao, líder hasta hoy.
La jornada ha tenido esas dos batallas diferencias, dos carreras en una, porque el pelotón dejó hacer al grupo de los escapados, en el que entraron varios de los sospechosos habituales de las fugas en la prueba italiana. Arrieta, De la Cruz, Kämna, Pinot, Traaen, Amador, Bais, Brenner, Cañaveral, Cepeda, Covili, González, Iturria, Piccoli y Zardini fueron los componentes de la escapada. Entre ellos, los dos más fuertes fueron Pinot, enrrabietado tras quedarse ayer a las puertas de la victoria, y De la Cruz, que buscaba su primer triunfo con el Astana y el que hubiera sido también su primer triunfo desde 2019.
Pinot llegó incluso a dejar atrás a De la Cruz en la ascensión final, aunque el español logró volver a su altura. En el sprint final se impuso con claridad el corredor francés, que, hoy sí, consigue volver a ganar después de tres años de penurias y malos ratos.
Por detrás, en el grupo principal se jugó la general. A Bilbao, que hasta ahora se había mostrado muy sólido, se le ha torcido el día. Llegaba con una renta de apenas dos segundos con Bardet, que no ha podido mantener. El corredor francés atacó con fuerza y se lanzó a por la victoria en la general, su primer triunfo del año. El australiano Michael Storer y el neerlandés Thymen Arensman. Bilbao fue finalmente cuarto a 21 segundos del podio.
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