Lo de hoy ha sido otra cosa. Después de la anodina etapa de ayer, el Giro nos ha regalado una jornada realmente emocionante, llena de alternativas. No ha habido ataques entre los hombres de la general, pero sí una gran batalla en la lucha por la etapa. Para empezar, ha costado mucho formar la fuga del día, muchísimo. 77 kilómetros de ataques y contraataques constantes hasta que siete ciclistas se han marchado hacia adelante: Wout Poels, Davide Villella, Davide Formolo, Diego Camargo, Koen Bouwman, Bauke Mollema y Tom Dumoulin. Casi nada. Mucho nivel.
El mejor clasificado de la general era Bouwman, situado a cinco minutos y medio de Juanpe López. El ciclista neerlandés del Jumbo-Visma ha sido el gran protagonista del día. Se ha llevado la etapa, su segunda victoria como profesional, la mejor de su vida, y además se ha situado como nuevo líder de la clasificación de la montaña. Eso sí, aunque fue líder virtual de la carrera, no ha llegado a poner en riesgo la maglia rosa del ciclista español, cuyo equipo además tuvo el acierto de meter en la fuga a Bauke Mollema, así que se liberó en gran medida de la responsabilidad de dar caza a los fugados, tarea que asumió el Ineos, el equipo del máximo favorito a la victoria final, Richard Carapaz.
Los hombres de la general se han guardado para días futuros, y eso que el recorrido daba juego y hubiera permitido más batalla. La emoción se concentró en la disputa por la etapa, realmente preciosa. El Jumbo-Visma contaba con la ventaja de llevar a dos ciclistas en cabeza, Dumoulin y Bouwman, y ha sacado partido de esa ventaja. No se lo han puesto fácil sus rivales, sobre todo, Mollema y Formolo. Ambos intentaron descolgar a los dos corredores neerlandés, y lo lograron incluso con Bouwman en el último puerto del día, pero finalmente logró reintegrarse en el grupo delantero y secar cada ataque de sus adversarios en la parte final. Dumoulin trabajó para su compañero, que fue el más rápido en el final cerda arriba por las calles de Potenza.
Lamentablemente, el día también ha dejado la noticia del abandono de Sergio Samitier, del Movistar, por culpa de una caída. El equipo ha confirmado que pese al fuerte golpe en la cabeza sufrido por la caída, no tiene lesiones, según las primeras pruebas médicas.
Antes de la etapa con final en alto, en el Blockhaus del domingo, etapa con un recorrido atractivo en Nápoles, con un circuito que posiblemente estará igual de atestada de público que la de hoy, realmente impresionante.
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