Hasta hoy, 17 ciclistas españoles habían portado la maglia rosa de líder en el Giro de Italia. A esa lista se acaba de sumar Juanpe López. A sus 24 años, el ciclista del Trek ha entrado en la fuga del día, ha sabido batallar y moverse en el momento justo, y ha terminado siendo segundo en la etapa, ante un colosal Lennard Kämna, pero ha sacado suficiente tiempo al resto de miembros de la escapada como para ponerse líder de la prueba italiana. Ha entrado en meta golpeando el manillar, lamentando no haber podido ganar la etapa, pero se ha convertido en el primer español en vestirse de rosa en el Giro siete años después de lo que lograra por última vez Alberto Contador.
Día de gloria para Juanpe López, que se une al selecto grupo de españoles que han liderado el Giro, formado por Miguel Indurain (29 días de maglia rosa), Alberto Contador (23), José Manuel Fuente (15), Julio Jiménez (11), Francisco Galdós y Joaquim Rodríguez (10), José Pérez Francés (8), Miguel Poblet (6), David Arroyo (5), Antonio Suárez (4), Antonio Gómez Del Moral (3), Salvador Botella, Abraham Olano, José Enrique Gutiérrez, Juan Carlos Domínguez y Beñat Intxausti, con un día cada uno. López, muy emocionado, ha declarado en meta que quiere disfrutar de cada día portando la maglia rosa de líder. El recorrido de los próximos días y la ventaja que ha conseguido con la fuga bidón de hoy le permiten soñar con mantenerse al frente de la prueba italiana unos cuantos días.
El ciclista español del Trek ha compartido fuga con Valerio Conti, Lennard Kämna, Davide Villella, Rein Taaramäe, Gijs Leemreize, Sylvain Moniquet, Mauri Vansevenant, Stefano Oldani, Rémy Rochas, Diego Camargo, Erik Fetter, Alexander Cataford y Lilian Calmejane. Casi nada más empezar la ascensión al Etna se fue en solitario Oldani, precisamente, compañero de Van der Poel en el Alpecin Fenix, que había perdido contacto con el pelotón casi nada más empezar la ascensión final y ha perdido el liderato de la carrera.
Juanpe López atacó a falta de 11 kilómetros, muy valiente. Abrió hueco, pero cuando a 7,6 kilómetros del final arrancó Kämna, parecía claro que lo tendría complicado ante el empuje del ciclista alemán del Bora. A 2,6 kilómetros alcanzó a López. Los dos hablaron entonces, da la sensación de que con la intención de entenderse bien y colaborar para que sus perseguidos no les dieran caza. Kämna no dio opción a López y alcanzó así su tercera victoria del año, tras sendos triunfos en la Vuelta a Andalucía y en el Tour de los Alpes.
En cuanto a la lucha por la general, la primera etapa con final en alto ha cumplido su tradición en las grandes vueltas, esa que dice que este día no se sabe quién ganará la carrera, pero sí quien no lo hará. Miguel Ángel López se ha tenido que retirar en los primeros kilómetros de la etapa, aquejado de un fuerte dolor en la cadera. Triste noticia para el corredor colombiano del Astana, más aún después de su abandono de la Vuelta del año pasado. Su compañero de equipo, Vincenzo Nibali, que además hoy corría en su Sicilia natal, también perdió contacto muy pronto con el pelotón, igual que Tom Dumoulin, los dos favoritos que han mostrado hoy mayor debilidad. El resto, sin diferencias ni apenas movimientos, todos llegaron juntos, con Richard Carapaz esprintando en la línea de meta para intentar arañar unos segundos.
En el grupo de favoritos también entró Simon Yates, quien se dejó caer al coche del médico de carrera varias veces al principio de la etapa, tras verse envuelto en una caída en la parte inicial. Es el mejor clasificado en la general de los que aspiran a ganar la carrera.
Mañana, etapa con previsible final al sprint en la que Juanpe López portará la maglia rosa de líder. Cuenta con 39 segundos de ventaja sobre Kämna, 58 sobre Taaramae y 1:42 sobre Simon Yates. Pello Bilbao es séptimo en la general y Mikel Landa, duodécimo.
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