Lorena Wiebes se ha convertido en la primera líder de la historia del Tour de Francia femenino. La corredora neerlandesa del DSM se ha impuesto al sprint en los Campos Elíseos por delante de Marianne Vos. Ha sido una volata con las mejores velocistas del mundo en un día histórico para el ciclismo femenino. Esta mañana, con la Torre Eiffel de fondo, se ha celebrado la presentación de equipos y después se ha tomado la salida a la etapa, el comienzo de una carrera que está llamada a ser un punto de inflexión para el ciclismo femenino.
Ha habido un buen número de ataques en las 12 vueltas al clásico circuito de los Campos Elíseos parisinos, en el que concluía dentro de unas horas el Tour masculino. La primera escapada que cuajó estuvo formada por Emily Newsom y Mischa Bredewold, aunque su intentona fue frustrada por el pelotón antes de que Marianne Vos se impusiera en el primer sprint intermedio.
A 44 kilómetros atacó Pauline Allin. Más tarde lo probó Henrietta Christie. A 22 kilómetros del final quienes se movieron fueron Lach, Markus e Ysland. Tampoco su escapada logró abrir un gran hueco. Finalmente, cuando fueron cazadas, atacó Verhulst, que fue la última fugada en ser alcanzada por el gran grupo. Vos fue la primera en lanzar el sprint y tuvo opciones de victoria hasta el instante decisivo, pero Wiebes protagonizó una sensacional remontada que le permitió ganar la etapa y vestir el primer maillot amarillo de este Tour de Francia femenino que tanto ilusiona y que tanto representa como gran paso adelante del ciclismo femenino.
La victoria de hoy de Wiebes es la decimosexta de la temporada. Casi nada. La corredora neerlandesa está siendo la gran dominadora de las llegadas masivas esta temporada. Lamentablemente, el día también nos ha dejado unas cuantas caídas. La más grave es la que ha obligado a abandonar a Alana Castrique.
Mañana, segunda etapa, también propicia para el sprint. Nueva ocasión para Wiebes.
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