No es que este Giro esté siendo el más entretenido de los últimos años, la verdad, pero es cierto que al menos las digas están dando más juego y están teniendo más posibilidades de éxito de lo que suele ser habitual. Hoy, una vez más, y van siete, el vencedor del día procedía de la escapada del día. Además, hemos vivido un cambio de líder que en condiciones normales no cambia sustancialmente nada en la lucha por ls victoria final, pero que siempre añade alicientes a la carrera.
Dos son lo grandes nombres propios del día: Nico Denz, del Bora, que se ha llevado su segundo triunfo de etapa en este Giro tras imponerse en meta a los compañeros de escapada con los que se disputó la victoria, y Bruno Armirail, del Ag2r, que pasa a ser el nuevo líder de la carrera gracias a la fuga bidón del día. El francés vestirá mañana la maglia rosa y aventaja en 1:41 a Geraint Thomas. No parece una distancia que permita hacer soñar a Armirail con grandes aspiraciones para la general, pero lo mete ahí, en lo más alto, a las puertas de la tercera semana de la carrera. Una maglia rosa del Giro es una maglia rosa sea cual sea el día de competición, pero con la prueba tan avanzada tiene si cabe más mérito e importancia para el ciclista galo y para su equipo.
Junto a ellos, firmaron la numerosa y consentida escapada del día Davide Ballerini, Pieter Serry, Nicolas Prodhomme, Larry Warbasse, Stefano Oldani, Luis León Sánchez, Andrea Pasqualon, Jasha Sütterlin, Alberto Bettiol, Davide Bais,Mirco Maestri, Henok Mulubrhan, Laurenz Rex, Simon Clarke, Derek Gee, Stephen Williams, Fernando Gaviria, William Barta, Carlos Verona, Warren Barguil, Thibault Guernalec, Marius Mayrhofer, Alessandro De Marchi, Bauke Mollema, Toms Skujins y Otto Vergaerde.
Mañana decimoquinta etapa con un recorrido exigente, ya que los ciclistas deberán subir cuatro puertos. El último, de segunda categoría, a 30 kilómetros de meta.
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