Tadej Pogacar ha vuelto a competir hoy; es decir, ha vuelto a ganar. Para el ciclista esloveno ponerse un dorsal y alzar los brazos son sinónimos, correr una carrera y ganar significa básicamente lo mismo. Vuelve el corredor del equipo emiratí y vuelve como suele, ganando. Así es él, nunca se sacia su sed de victorias, siempre quiere y, por lo tanto, consigue más.
En principio, la primera etapa del Criterium du Dauphiné no era particularmente propicia para los hombres de la general, pero en este bendito ciclismo moderno siempre puede haber fiesta. Y hoy los grandes favoritos a la victoria final en la general de la carrera francesa, mejor dicho, Pogacar y el resto de aspirantes, porque Pogacar siempre está en otra dimensión, han querido entrar en acción a las primeras de cambio.
Aprovechando los repechos finales se fueron hacia adelante Pogacar, Jonas Vingegaard (Visma-Lease a Bike), Remco Evenepoel (Soudal-Quick Step), Santiago Buitrago (Bahrein) y Wout Van Aert (Visma-Lease a Bike). Vaya quinteto. El pelotón se les echó encima, pero llegaron con tiempo los cinco de cabeza para disputar el triunfo parcial, que se llevó, naturalmente, Pogacar, para quien ganar es tan natural como respirar. Ya es líder del Dauphiné, la última prueba preparatoria para el Tour.
Hoy también ha concluido la Volta a Catalunya con una fiesta doble para el FDJ-Suez, o triple, incluso. A la victoria en la general de Demi Vollering y el segundo puesto de Élise Chabbey se ha sumado el triunfo de etapa de Loes Adegeest, coequipier de Vollering. Ha completado el podio de la carrera catalana Marion Busnel (Visma-Lease a Bike).
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