Después de disfrutar con las primeras clásicas del calendario, llega el turno para el tríptico de las Ardenas. Comienza esta intensa semana ciclista, como siempre, con la Amstel Gold Race. Una prueba muy atractiva con un pelotón plagado de estrellas de primer orden y con un abanico de aspirantes al triunfo bastante amplio. Los 256,2 kilómetros de recorrido entre Maastricht y Valkenburg presentan 31 cotas, concentradas en su mayoría, en la parte final de la carrera. El final será en la subida al Cauberg, 700 metros de longitud con una pendiente máxima del 17% en algún tramo de este muro final donde se decidirá la clásica.
Como digo, el listado de participantes deja muchos corredores que, si están en buenas condiciones físicas, como cabe esperar de la mayoría de ellos porque no tenemos ningún motivo para pensar lo contrario, pueden estar en condiciones de disputar el triunfo en la carrera cervecera que cumple 47 años. Un rápido repaso a los participantes nos deja esta pléyade de estrellas: Cadel Evans, Philippe Gilbert, Vincenzo Nibali, Peter Sagan, Andy y Frank Schleck, Sylvain Chavanel, Bauke Mollema, Robert Gesink, Samuel Sánchez, Joaquim Rodríguez, Alejandro Valverde. Cualquiera de ellos podría ser el ganador esta tarde.
El vencedor del año pasado, Gilbert, no está teniendo un buen comienzo de año debido, en gran parte, a la mala suerte con las lesiones. Veremos en qué condiciones llega a la Amstel, aunque tiene en el mismo equipo (BMC) a Evans, un corredor que perfectamente puede estar en la batalla por esta prueba en ese final explosivo. Nunca ha ganado un español esta carrera. Parece extraño, pero es así y da una idea también de lo complicada que esta esta prueba. Hemos estado a punto varias veces, la última, el año pasado cuando Joaquim Rodríguez fue segundo. Tanto Purito como Samuel Sánchez cuentan con indudables opciones de victoria hoy. Llegan en buena forma, ahí están sus victorias esta temporada que lo demuestran y su reciente pulso en la Vuelta al País Vasco. A los dos habrá que seguir con atención y de los dos podemos esperar grandes cosas.
Naturalmente, también seguiremos de cerca a Alejandro Valverde. Él sabe lo que es ganar en las otras dos clásicas de las Ardenas, pues ha vencido dos veces la Flecha Valona y una la Lieja-Bastoña-Lieja. Si llega en condiciones, como parece, creo que tendrá opciones claras de victoria. Es más. Valverde está en las quinielas de prácticamente todo el mundo y estoy convencido de que será una de las ruedas a seguir, un corredor del que estarán pendientes el resto de aspirantes al triunfo. Será complicado, por la entidad de los rivales y por lo duro de la prueba, pero hoy hay opciones bastante claras de cantar el primer triunfo español en la Amstel Gold Race. Y no sólo por Valverde, porque com digo confío mucho en Joaquim Rodríguez y Samuel Sánchez. Es de desear que las múltiples rotondas e isletas no jueguen un papel protagonista provocando caídas a ningún ciclista para que podamos ver un gran espectáculo.
La carrera se decidirá en el Cauberg, pero a doce de meta está situado el Keutenberg, que es la cota más dura de todo el recorrido y presenta desniveles del 22%. Es posible que allí también haya quien intente romper definitivamente la carrera y hacer su apuesta por la victoria. Esta tarde lo veremos. Teledeporte y Eurosport emiten la Amstel desde las 15 horas.
No sólo de clásicas de las Ardenas vive el hombre, porque ayer también vimos la victoria de Luis León Sánchez en la Vuelta a Castilla y León. Ganó en Ávila y se colocó líder de la carrera. Aventaja en seis segundos al francés Guillaume Levarlet y en ocho a Pablo Urtasun en una apretada clasificación general que se decidirá en la etapa final de hoy con las bonificaciones jugando un papel clave. Luisle tiene, en todo caso, opciones de conseguir llevarse el triunfo final.
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