Pasado
No nos libramos de los fantasmas del pasado. La composición de esta entrada traerá asuntos pretéritos que nos siguen golpeando, noticias actuales y perspectivas de futuro. El presente y sobre todo el futuro es lo más importante. Conocer el pasado para no repetirlo, también. Eso está claro. Pero hay un límite que no deberíamos traspasar. No deberíamos dejar que los errores de otros, que las trampas del ayer ensombrezcan el hoy el mañana. Fundamentalmente, porque no es justo que así sea. Los que ayer se equivocaron pueden merecer nuestro más absoluto desprecio o nuestro perdón. Allá cada cual. Pero no tienen derecho a sembrar de sospechas y dudas el presente y a entorpecer el futuro que entre todos estamos construyendo. Sí, hablo de dopaje. Hablo, más concretamente, de la biografía de Michael Rasmussen (Fiebre amarilla) en la que pone el ventilador a funcionar y lanza acusaciones a diestro y siniestro.
En ese libro, más de lo mismo. El relato ya leído en otros casos de corredores que confiesan haberse dopado y que cuentan escenas concretas de ese pasado turbio que debemos conocer sí, aunque con él se lucren ahora los que antes se lucraron de hacer trampas y engañar al resto, incluso aunque dañen con su actitud el futuro del deporte que no sé si amarán o no, pero del que han vivido y viven. Rasmussen relata varias escenas como una en el Giro de 2002 (once añitos de nada hace de aquello) en la que cuenta que entró en una sala donde estaban Bjarne Riis (actual director del Saxo Bank) y Tyler Hamilton, quien se acaba de inyectar synacthen, junto al doctor Piet de Moor. Dice Rasmussen que Hamilton le invitó a unirse y que él aceptó sin que Riis le dijera nada. También cuenta que en 2013 compró EPO y hormona del crecimiento en Mallorca, cuando estaba de pretemporada con Nicki Sørensen, corredor del Saxo Bank.
Otro de los corredores a los que dispara Rasmussen es a Ryder Hesjedal, ganador del Giro 2012, que esta semana ha reconocido a través de un comunicado como ciertas esas acusaciones. "He amado y vivido este deporte, pero hace más de una década elegí el camino equivocado. Y aunque esos errores se produjeron hace tanto y fueron breves, nada cambia el hecho con el que he convivido desde entonces", cuenta Hesjedal en esa nota. Precisamente por el tiempo transcurrido desde ese comportamiento ilícito, el canadiense no podrá ser sancionado, según comunicó la federación de ciclismo de su país. "Para todos los que me conocen, dentro y fuera del deporte, a aquellos que han alentado mis sueños, entre ellos mis amigos, mi familia, los medios, aficionados, colegas y sponsors, a los corredores que no hicieron lo que yo en aquellos años, sinceramente pido perdón por mi participación en el oscuro pasado del deporte. Siempre estaré arrepentido", explica.
La USADA cuenta que este tipo de actitudes de quienes se equivocaron y cuentan su experiencia son claves para construir un futuro limpio del deporte. Es posible. Quién sabe. Creo que lo importante es que el pasado no se puede borrar y en lo que todos debemos centrarnos es en construir un futuro creíble y limpio. Creo también que hace años que estamos en ese camino y que los errores del pasado son piedras en la senda. Tal vez piedras merecidas e inevitables. Probablemente. Pero ahora toca ir hacia atrás sólo para coger carrerilla. No queda otra.
Presente
El presente pasa por la actualidad informativa. Por fichajes, como la llegada de Juanjo Lobato al Movistar procedente del desaparecido Euskaltel-Euskadi o el rumor de que Samuel Sánchez podría integrarse en las filas de un equipo continental belga, el Wanty Groupe Gobert, cuyo director será Hilarie van der Schueren, exdirector del también desaparecido Vacansoleil-DCM holandés. Veremos. O los galones que tendrá Michele Scarponi en su nuevo equipo, el Astana, durante el Giro. El veterano corredor transalpino será el líder del conjunto kazajo en la corsa rosa y acompañará a Nibali en su objetivo principal del próximo año, el Tour de Francia.
Sobre el presente del ciclismo español, y también sobre su futuro, habló Pedro Delgado en la presentación de un evento ciclista en Bogotá. Siempre interesa escuchar sus palabras. El excorredor y comentarista deportivo afirmó que "el ciclismo español vive un sueño con pesadillas; el sueño es que en este 2013 el número uno del mundo es un español, Joaquim Rodríguez, luego Alejandro Valverde está cuarto y Alberto Contador cerca (¿?). Por equipos, Movistar es el mejor de la liga y por países España es el mejor". Ese es el sueño. "En cambio, no tenemos patrocinadores, ésa es la gran pesadilla. Tenemos muchos corredores jóvenes con mucha proyección que pueden ser futuros campeones, pero se desaniman porque no hay equipos; para el año que viene sólo estarán Movistar y Caja Rural". Resaltó Delgado que esto es resultado de la crisis económica en España. Sí, así es. Pero no sólo. Arrastramos nuestras propias crisis en el ciclismo que se suman a la gran crisis general.
Futuro
Para hablar de futuro, dos noticias. Una sobre la reforma del calendario ciclista y del modelo de competición de la que ya hablamos aquí y que sigue sus pasos. La otra es sobre la Vuelta a Andalucía, que desafiando a la crisis cumple el próximo año su edición número 60. Se dice pronto. Para tal efeméride su director general, Joaquín Cuevas, avanza que su equipo está trabajando para "ofrecer una carrera espectacular en 2014 para conmemorar el 60 aniversario". "Trabajamos para disponer de las actuales figuras del ciclismo y de los mejores conjuntos del mundo", declaró. También ha afirmado que "nos ha costado mucho trabajo organizar las últimas ediciones y damos las gracias a las instituciones que han colaborado con nosotros, que han sido nuestro principal motor de superación". La carrera nació en 1925, aunque fue una edición esporádica y no se volvió a disputar hasta 1955. Desde entonces se ha celebrado de manera ininterrumpida cada año, menos en 1978.
Sobre la normativa que prepara el Consejo de Ciclismo Profesional (CCP), como explicaban esta semana desde Biciciclismo, los proyectos que Fernando Alonso y el excéntrico millonario Olega Tinkoff han anunciado para 2015 no podrían acceder directamente a la primera división, a la Champions League de 16 equipos, sino que tendrían que empezar por la segunda. Los cambios se aplicarán de manera gradual desde el próximo año hasta 2020. Tendrá un funcionamiento de ascensos y descensos, pero al menos el primer año esos nuevos proyectos no tendrían cabida en la primera división. Y en la segunda sólo entrarán ocho. El resto, formará parte de la tercera. Además, cada año sólo habrá un descenso desde primera división, en un modelo que será muy cerrado, casi tipo NBA o Fórmula 1. Dos equipos podrán bajar de segunda a tercera.
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