Tras 28 kilómetros de máximo esfuerzo, con una exigente cota de tercera categoría como colofón, el BMC ha ganado la contrarreloj por equipos del Tour con menos de un segundo de ventaja sobre el Sky. El conjunto de Tejay Van Garderen, sin duda el quinto hombre tras los cuatro fantásticos (Froome, Contador, Nibali y Quintana), se ha llevado la victoria, pero no ha podido situar al joven corredor estadounidense como nuevo líder. Se queda a 12" de Froome. No lo ha permitido la buena crono del Sky que, si bien se ha quedado sin la victoria parcial ha dado una exhibición de solidez, sobre todo por la fortaleza asombrosa y temible de un Chris Froome que se ha echado a las espaldas al equipo. Con la miel en los labios se ha quedado el Movistar de Nairo Quintana y Alejandro Valverde (se ve muy fuerte al murciano).
Si ya es poco frecuente que una crono por equipos se dispute en la novena etapa (más que poco frecuente, prohibido por la normativa que obliga a situarla en el primer tercio de la carrera, aunque al Tour se le dio permiso especial), tampoco es común que se incluyan puertos en su trazado. Todo ello ha tenido la contrarreloj por escuadras de hoy en la ronda gala, donde se han visto muy penalizados los equipos que, como el Orica-GreenEdge, mas afectados estuvieron por las caídas en las etapas precedentes. Todos los equipos llegaban a meta, tras el puerto de dos kilómetros de longitud, mirando hacia atrás y contando para ver si iban cinco corredores, pues es el quinto ciclista quien da tiempo al equipo.
BMC ha marcado el mejor tiempo con menos de un segundo por delante del Sky. El quinto hombre de cada equipo era quien daba tiempo a la escuadra y el quinto hombre es el título que podemos dar también a Tejay Van Garderen, que no ha dado un solo síntoma de debilidad en lo que llevamos de Tour, que es más de lo que se puede decir de uno de los cuatro grandes favoritos, un Vincenzo Nibali que acaba la primera semana con 2:22 de retraso sobre el líder de la carrera después de que el Astana haya cedido hoy 35". Lo peor no es el tiempo cedido sino la sensación de que está lejos de su mejor forma.
Apenas un día complicado en el que perdieron tiempo han tenido los corredores del Movistar, con Quintana como jefe de filas y Valverde de segundo as en la manga. Fue en la jornada de los abanicos, cuando perdieron un minuto y medio con el resto de candidatos. Hoy el equipo telefónico ha realizado una crono excepcional, sólo cuatro segundos peor que el BMC. Nunca antes desde los tiempos de la ONCE de Manolo Saiz hemos estado tan cerca de ver a un equipo español ganando una crono por escuadras en la Grande Boucle. El Movistar ha tenido un momento de falta de coordinación en el que dos corredores se fueron por delante del resto. Ha sido cuestión de unos pocos metros hasta que desde el coche se ha puesto orden, pero al ver tan escasa diferencia puede que ese episodio sea la razón que ha hurtado al Movistar el triunfo en la etapa. En todo caso, nada que objetar. Su crono ha sido sensacional.
Buena crono, aunque tal vez algo por debajo de lo esperado en un primer momento, ha hecho el Tinkoff-Saxo de Alberto Contador, que ha cedido 28 segundos con el BMC de Van Garderen y el Sky de Froome. El corredor de Pinto acaba la primera semana cuarto a 1:03 del ciclista británico de origen keniata. No es nada alarmante y ha logrado salvar los obstáculos de estas primeras etapas. Peor les ha ido a otros candidatos, los de segunda fila después del G-4+1. Así, el Ag2r de Jean Christophe-Péraud y Romain Bardet ha cedido 1:24 y la FDJ de Thibaut Pinot, 1:33. Todos estos corredores franceses pierden ya más de tres minutos con Froome y están obligados a atacar. Joaquim Rodríguez ocupa el puesto 18 a 3:53 de Froome. El Katusha ha cedido 1:53 hoy. Esta especialidad no se le da bien al equipo ruso, que encima partía con dos corredores menos que el resto de las grandes escuadras. Purito deberá moverse. Visto con optimismo, tendrá más margen para atacar al encontrarse tan lejos. Está fuerte el corredor catalán, que quiere llevarse de este Tour algo más que su espléndida victoria de etapa en el muro de Huy.
Mañana, primera jornada de descanso antes de que el martes, 14 de julio, día de la fiesta nacional francesa, llegue la montaña. El Tour llega a su segunda semana con la clasificación muy abierta y, lo que es aún más importantes, con todos los favoritos sanos y salvos. Intensas han sido estas primeras nueve etapas y eso, teniendo en cuenta que aún queda por delante toda la montaña, dice mucho del acierto de la organización del Tour al programar una primera semana con múltiples alicientes.
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