¿Quién dijo que las contrarrelojes no son divertidas? Julian Alaphilippe acaba de ganar en Pau la crono más emocionante en muchos años en el Tour de Francia. Ha sido un día memorable de ciclismo, en el que el ídolo francés no sólo no ha perdido el maillot amarillo, sino que ha salido reforzado en su liderato, ganando la etapa y ampliando su ventaja respecto al resto de rivales. Ha sido la mejor contrarreloj de su vida, su segunda victoria de etapa en esta ronda gala y un triunfo especial, porque lo logra siendo líder del Tour y llevando aún más lejos su sueño de seguir al frente de la carrera de casa. La crono ha dejado mejos diferencias de las esperadas y, sobre todo, ha regañado varias sorpresas, como la propia victoria de Alaphilippe o el extraordinario rendimiento de Thomas De Gent, que ha soñado con ganar la etapa hasta el final.
Todas las miradas apuntaban hoy a Geraint Thomas. Se daba por hecho que era el máximo favorito a la victoria parcial y se veía como muy probable que se situara líder. No ha logrado ni una cosa ni la otra y, aunque ha sacado tiempo a todos sus rivales por la general, no ha arrasado como se esperaba. Definitivamente, sí, este Tour es una carrera abierta, mucho más que los últimos años. No hay un dominador todopoderoso, o no del Ineos, desde luego. También se confirma con lo visto hoy que la mayoría de los aspirantes a ganar la carrera se han tomado muy en serio la crono y se reservaron ayer en la primera etapa pirenaica para dar lo máximo en la contrarreloj de hoy. No todos han sacado partido de su decisión de ayer, claro, porque el día deja claros ganadores y perdedores.
La primera pregunta obligada tras la etapa de hoy es si Alaphilippe, sorprendente y colosal ganador de la crono de hoy en Pau, puede ganar el Tour. O, al menos, hasta dónde puede prolongar su liderato. El ciclista francés del Deceuninck-Quick Step sale reforzado de la crono, con 1:26 de ventaja sobre Thomas, 2:12 sobre Steven Kruijswijk y 2:44 sobre su compañero de equipo Enric Mas. No hay motivos para pensar que el corredor francés pueda ganar la ronda gala. Quedan las dos etapas de Pirineos de este fin de semana y todos los Alpes por delante, terreno demasiado exigente y propicio para ver ataques de sus rivales. Cuesta creer que Alaphilippe pueda resistir al frente de la carrera hasta el final, pero tampoco nadie esperaba que hoy pudiera ganar la crono y lo ha hecho por todo lo alto, generando un éxtasis colectivo en Pau y en toda Francia. El tiempo dirá hasta dónde puede llegar el corredor francés. Desde luego, la admiración que despierta no para de crecer, es un ciclista excepcional que acaba de ganar la única crono individual de este Tour y que sigue líder a mitad de la prueba.
El otro gran beneficiado del día ha sido Enric Mas, sobre el papel, el hombre del Deceuninck-Quick Step para la general de este Tour. Ha hecho una crono magnífica y ya es cuarto en la general. De momento, tendrá que supeditar sus opciones en la general a su jefe de filas y líder de la prueba, pero el corredor mallorquín, en principio, parece un candidato más sólido a largo plazo. Probablemente, Mas tendrá cierta libertad, pero se pueden dar situaciones de carrera en las que se deba contener. Todo dependerá de hasta dónde llegue Alaphilippe en la versión sublime mostrada hasta ahora. Queda mucho Tour, pero claramente la situación del equipo belga es envidiable y debe saber jugar bien sus bazas.
Egan Bernal, la segunda baza del Ineos tras Thomas, ha rendido algo por debajo de lo que se esperaba de él en esta crono. Ahora es quinto en la general a 2:52 de Alaphilippe y a 1:26 de su compañero de equipo y vigente ganador del Tour. El conjunto británico se enfrenta a una situación diferente a la vivida en los últimos años, porque a Thomas no se le ve tan fuerte como en 2018, lo mismo que puede decirse de Bernal. Aunque, como quedó claro ayer en la primera etapa de Pirineos, el resto de rivales siguen teniéndole mucho respeto al equipo británico, este año parece mucho menos intocable que otras veces. Su jefe de filas es segundo en la general, el primero si seguimos pensando que a Alaphilippe se le hará largo el Tour, pero su ventaja respecto al resto de aspirantes no parece ni mucho menos insalvable. No nos engañemos, sigue siendo el principal favorito a ganar la ronda francesa, pero no está en una posición tan abrumadoramente superior a la sus adversarios.
Emanuel Buchman, Thibaut Pinot y Rigoberto Urán también han hecho una muy buena crono y ahora son sexto, séptimo y octavo en la general, a 3:04, 3:22 y 3:54 del líder, respectivamente. Es decir, a entre un minuto y medio y 2:28 de Thomas. Distancias importantes, sí, pero que invitan a esperar batalla en las jornadas montañosas venideras.
Noveno en la general es Nairo Quintana, uno de los principales derrotados de la contrarreloj. Ahora queda a 3:55 de Alaphilippe y a dos minutos y medio de Thomas. El Movistar tendrá que jugar ahora a atacar de lejos. Tiene a Alejandro Valverde duodécimo en la general a 4:29 del líder y a Mikel Landa, que ha hecho una crono decente, a seis minutos. Al equipo español no le queda otra que atacar, igual que a otras escuadras cuyos líderes quedan muy lejos tras la crono de Pau, como Romain Bardet, que se queda a 5:46 del líder. Jakob Fuglsang, damnificado por los abanicos del lunes, ha hecho muy buena contrarreloj, pero se queda a 4:29 del líder.
La contrarreloj, emocionante e intensa, también nos ha dejado una imagen muy preocupante, la caída de Wout Van Aert a poco más de un kilómetro del final. Se quedó mucho tiempo dolorido y ensangrentado en el suelo y se ha visto obligado a abandonar la carrera, pero afortunadamente las consecuencias de la caída han sido menores que las que se temían, ya que no tiene fracturas, sólo (entre comillas) un duro golpe y un corte en la pierna.
Mañana, más madera, con una etapa de 117,5 kilómetros con final en el Tourmalet, de categoría especial, cuya subida llegará después del Col du Soulor, de primera categoría. Día para ir despejando incógnitas y ver cómo resiste Alaphilippe y qué estrategias siguen el Ineos, el Movistar y el resto de aspirantes. El Tour se ha quedado precioso y mucho más abierto de lo que se temía antes de la contrarreloj de hoy.
Antes de la crono, por cierto, se ha disputado La Course by Le Tour, con victoria para Marianne Voss, quien ha lanzado un ataque formidable en el tramo final que le ha permitido superar a Amanda Spratt.
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