Euskadi, uno de los lugares donde se vive con más pasión el ciclismo, también ha sido de los más afectados por las suspensiones de carreras a la que ha obligado la crisis del coronavirus. No se han podido disputar, ni encontrar fecha alternativa para ello, la Vuelta al País Vasco y la Clásica de San Sebastián. Había muchas ganas de ciclismo en Euskadi y al menos hoy sí se ha podido celebrar el Circuito de Getxo, que además cumple su edición número 75. Ha sido un bello día de ciclismo que ha terminado con victoria de Damiano Caruso, tras un plan magistral del Bahrein-McLaren, que ha podido llegar a buen puerto incluso a pesar de la mala suerte, que ha jugado en contra de Mikel Landa.
El corredor vasco, que prepara su primer Tour de Francia como líder indiscutible de su equipo, corría además con una motivación especial al estar en casa. Landa, que ayer mismo terminó segundo en la Vuelta al País Vasco, sólo por detrás del portentoso Remco Evenepoel. Hoy Landa ha querido volver a ser protagonista y ha entrado en uno de los cortes del tramo final de la prueba, ya en la última vuelta del circuito. Pero, poco después, cuando ya fueron cazados, el corredor se vio envuelto en una montonera, sin consecuencias serias para él, pero que le dejaron sin opciones para luchar por la victoria.
Pese a la caída de Landa, el Bahrein McLaren siguió tirando con fuerza del pelotón, cada vez más reducido. Estaba claro que el equipo tenía más bazas, ya que fue el más activo buscando romper el gran grupo, junto al Euskaltel-Euskadi, que lo ha probado de todas las maneras. Y pronto demostró el Bahrein McLaren què planes tenía. Seis ciclistas se fueron por delante, dos de ellos, compañeros de Landa: Pello Bilbao y Damiano Caruso. Junto a ellos, Gonzalo Serrano (Caja Rural-Seguros RGA), Juanpe López (Trek), Nelson Olivera (Movistar) y Tsgabu Grmay (Nippo). La mala suerte, esa que dejó fuera de juego a Landa, volvió a aparecer y esta vez quienes sufrieron una caída fueron tres de los componentes de la fuga. Sólo quedaron por delante los dos Bahrein y Oliveira.
Situación ideal para Caruso y Bilbao. Atacó el italiano y, claro, Bilbao se pegó a la rueda de Oliveira, que no tardó demasiado en descubrir que no tenía nada que hacer, porque incluso aunque diera caza a Caruso, Bilbao llegaría fresco junto a él y le arrebataría la victoria. Así que los dos fueron cazados por el grupo y Caruso se lanzó en una contrarreloj en solitario en búsqueda del triunfo. Por detrás, el pelotón llegaba a mil por hora, pero el italiano logró conservar la suficiente distancia como para ganar la carrera y culminar así con éxito el plan de su equipo. Giacomo Nizzolo (NTT) tiempo al grupo y Edu Prades, del Movistar, completó el podio.
Hoy el día ha sido redondo para el Bahrein McLaren, ya que Sonny Collbreli ha ganado al sprint la segunda etapa de la Ruta de Occitania.
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