Luis León Sánchez, campeón de España


Al ciclismo le sienta mucho mejor la anarquía que la dictadura. Cuando no hay un equipo dominador en una carrera llegan las alternativas y se dispara el espectáculo. Es lo que ha sucedido hoy con el Campeonato de España de ciclismo en carretera, una de las mejores carreras de la temporada. Sin duda, una de las mas abiertas y emocionantes hasta el final. En los últimos años, los nacionales de ciclismo han sido coto privado para el Movistar, pero este año el equipo telefónico ha dejado a sus mejores hombres fuera del campeonato, ya que están concentrados de cara al Tour. Eso, más las ganas que le han puesto los ciclistas participantes y el precioso y exigente circuito entre Úbeda y Baeza, han propiciado una carrera excepcional, en la que se ha llevado la victoria Luis León Sánchez, uno de los ciclistas con más clase del pelotón español. 

Con las lágrimas de emoción de Luisle terminó la carrera. Poco después, quien lloraba, pero de rabia, era Jesús Herrada, que fue neutralizado por el murciano de Astana a muy poco de meta, tras una apasionante persecución. Luisle le superó con claridad, pero encima Herrada tuvo un problema mecánico que le impidió entrar en el podio y le obligó a entrar andando en meta. A veces este deporte es muy duro. 

Herrada y Luisle han sido los protagonistas del desenlace de una prueba que, hasta entonces, había mostrado una enorme cantidad de alternativas. La ausencia de un equipo dominador y la sensación de que había muchos corredores con opciones anticipaban una gran carrera. Y eso es justo lo que hemos visto, con una sucesión imparable de ataques. Se movió Albert Torres, del Movistar, a 50 kilómetros del final. Atacó Óscar Sevilla, incombustible, y también lo hizo Iván García Cortina, hiperactivo, con una gran motivación y muchas ganas de dejarse ver, pero que pagó en la última subida los esfuerzos. Llegaron más y más ataques, un festín de demarrajes. La carrera estaba descontrolada. José Manuel Gallego, Gustavo César Veloso, Mikel Iturria y Antonio Angulo (estuvo muy activo el Euskaltel-Euskadi), Óscar Cabedo, Jaime Castrillo (representante de un magnífico Kern Pharma)...

Más y más ataques, movimientos sin fin. En la última ascensión a Mañuecos se movió Dani Navarro y tras él saltaron Vicente García de Mateos y Fernando Barceló. Este último trabajaba para Jesus Herrada, su líder en Cofidis. Era su avanzadilla. Se quedó solo por delante Barceló, pero el grupo de los favoritos se le echaba encima, así que Herrada lanzó su apuesta, decidido, valiente. Llegó a la altura de su coequipier y le superó, marchándose sólo hacia la victoria. Pero por detrás le perseguía Luis León Sánchez, a quien había echado una mano su compañero Gorka Izagirre. Y estar perseguido por Luisle es una posición muy incómoda, sobre todo en un circuito tan técnico como el de las calles de Baeza. 

El murciano llegó a su altura y le superó, lanzándose en pos de una victoria largamente perseguida, ya que nunca había sido campeón de España. La de hoy es la segunda victoria de la temporada para Luisle, tras la etapa que ganó en la Vuelta a Murcia. No es una victoria más, sin duda. Durante un año  lucirá los colores que le acreditan  como flamante campeón de España de ciclismo en carretera. Segundo fue Gorka Izagirre y tercero, García de Mateos. 

El primer ciclista élite ha sido Samuel Blanco. 



Ayer se disputó la prueba sub23 masculina, con victoria de Javier Romo tras una colosal exhibición. Es su tercera carrera y ayer demostró que tiene un prometedor futuro por delante. 

Comentarios